Maitane ALDANONDO
Gasteiz

SOFTWARE PARA GESTIONAR LOS ACTIVOS Y ASEGURAR LA INFORMACIÓN

JakinCode es una sociedad limitada dedicada a la inteligencia empresarial aplicada a la industria. Surgió del proyecto de fin de carrera de uno de sus socios promotores y ha desarrollado dos herramientas, la gestión de activos y la seguridad de la información.

Proteger la información de la empresa y tomar decisiones inteligentes son las ventajas que ofrece JakinCode a sus clientes. Mikel Díaz de Arcaya y Diego Gil crearon esta sociedad limitada dedicada a la inteligencia empresarial en 2014. Con sede en el Centro de Empresas e Innovación de Araba, el negocio se fundamenta en el proyecto de fin de carrera de Díaz de Arcaya, ingeniero informático, en el que desarrolló una herramienta para gestionar el mantenimiento de máquinas industriales. Dado el buen resultado que tuvo en fábrica decidieron poner en marcha la empresa para comercializarlo en todos los sectores industriales.

Admiten que emprender no era algo que se hubieran planteado, «pero una cosa llevó a otra». Recibieron ayuda de la SPRI con una subvención Ekintzaile y contaron con el apoyo de Bic Araba. Además la idea recibió en respaldo del programa Yuzz, promovido entre otros por el Banco Santander, que lo seleccionó como ganador de Araba. Gracias a ese reconocimiento conocieron el ecosistema emprendedor e innovador de Silicon Valley. No obstante, opinan que el asesoramiento de los empresarios senior del SECOT fue lo más interesante del programa. Al tratarse de una startup tecnológica, consideran que la inversión inicial, más que económica, fue el tiempo dedicado a la investigación y el desarrollo. Llevan poco más de año y medio en marcha, y el balance de lo recorrido es «muy positivo», pero tienen claro que «emprender es duro y hay que trabajar mucho para conseguir los primeros clientes», apunta Díaz de Arcaya. Éstos son principalmente grandes empresas industriales ubicadas en la CAV, Nafarroa y La Rioja.

La idea inicial era ofrecer a las empresas soluciones para tratar los datos que generaban de forma que contaran con información útil para la toma de decisiones. Pronto fueron conscientes de que también era necesario proteger la seguridad de dicha información. Para ambos objetivos han desarrollado dos productos propios: JC Asset Management y JC Information Security. El primero, explica Díaz de Arcaya, «genera informes y cuadros de mando que permiten analizar la situación de todos los activos de una empresa para ayudar a tomar decisiones que eviten averías repetitivas o deterioros incontrolados que generan altos costes». Por su parte, el segundo, posibilita la gestión de controles y las métricas que aplica una organización para minimizar su riesgo y poder aplicar las contramedidas adecuadas si se produce algún incidente.

Cada día surgen nuevas técnicas de ataque, «desde las más sofisticadas enmascaradas tras servicios legítimos para pasar desapercibidas, hasta pequeñas modificaciones de viejos métodos ya conocidos», lo que hace que la vigilancia continua sea necesaria para reducir riesgos. En respuesta a ello ofrecen cursos y formación relativa a la ciberseguridad. Ataques recientes como el de los papeles de Panamá, han puesto el foco en esta problemática, interés que han percibido en JakinCode. Señalan que hay empresas grandes concienciadas y que invierten muchos recursos en protegerse de posibles ataques informáticos, mientras que las pymes lo están algo menos. «En el último año muchas se están viendo afectadas sobre todo por un malware que cifra sus documentos y les piden un rescate para descifrarlos». Dado que no son conscientes de las amenazas que enfrentan, las empresas tienden a actuar de manera correctiva, cuando ya ha ocurrido el ataque. Ante esta situación recuerdan que es necesario dar el paso con anterioridad al problema. Ya se sabe, es mejor –y más barato– prevenir que curar.

 

Drones para analizar la seguridad de las comunicaciones

En la segunda edición del congreso Basque Industry 4.0 celebrado en octubre pasado en Bilbo, Jakincode presentó un proyecto desarrollado junto con la cooperativa alavesa Airestudio. Se trata de un servicio orientado a analizar la seguridad de las comunicaciones inalámbricas utilizando como herramienta los drones. Estos aparatos permiten la captura masiva de datos y posibilitan ubicar geográficamente las Wi-fi que están al alcance del sistema o detectar los dispositivos conectados, entre otros. Ambas empresas tienen su oficina en el Centro de Empresas e Innovación de Araba en Miñano y ya han colaborado en varios proyectos.