Rik Verbrugghe, que el sábado cumple 42 años, es el responsable deportivo del IAM en el Tour. Profesional desde 1996 hasta 2008, con tres victorias en el Giro y una en el Tour, en 2009 empezó su carrera como director en Quick Step y ha conseguido que el IAM realice su mejor Tour con su primera victoria de etapa con Pantano, que también fue segundo ayer. En ambos casos con una gran ayuda de sus compañeros a pesar de que no es fácil trabajar para los demás cuando el equipo ha anunciado su adiós.

¿Ven alguna posibilidad de que el equipo IAM siga la próxima temporada o el adiós es seguro?

La clave la tiene Michel Thétaz. Hay una posibilidad, pero es muy mínima. Hay pocas oportunidades de seguir, pero sería posible si se encuentra un patrocinador serio que va en la misma dirección que nosotros. No hace falta que sea un sponsor grande, pero si es mediano hay posibilidades de seguir con esta aventura. Se mira siempre si hay opciones, pero no es fácil. Es Michel Thétaz, el propietario de IAM Cycling, el que tiene la llave y si ve que hay una oportunidad de seguir con el equipo la va a aprovechar.

¿Es complicado dirigir un equipo que anuncia que dejará el pelotón a final de temporada?

Es más difícil, pero he conseguido que los corredores entiendan que es importante ser colectivo y trabajar como un equipo y se ha funcionado bien a pesar del anuncio de que el equipo puede no seguir. Por ahora todo va bien, controlo el equipo y eso es lo importante.

Durante todo el Tour los corredores del IAM han trabajado para el equipo a pesar de que buscan asegurarse su futuro...

Hay corredores que ya han firmado con otros equipos porque es ahora el momento. Durante el Tour es normal que tengan contactos con otros managers y fiemen sus contratos, pero eso no cambia su papel en la carrera. Los corredores son profesionales y siguen cumpliendo lo que les pide el equipo.

¿Por qué resulta tan complicado ahora para los equipos encontrar patrocinadores pese a tener un buen papel y destacar en el Tour?

Todo el mundo está parecido. Cuando tienes la suerte de encontrar un patrocinador de mucha duración y buscas pequeños sponsors es difícil encontrarlos. Tenemos el gran sponsor, nos hace falta uno pequeño, pero no es fácil. Además hay unos valores éticos del equipo a los que Michel Thétaz da mucha importancia. Para que su imagen se asocie con alguien es necesario que la relación entre ambos sea buena y que el equipo tenga la misma filosofía que ha mantenido hasta ahora.

¿El caso de Michel Thétaz es similar al de Oleg Tinkov, que cada año pone muchos millones sin tener un patrocinador que le ayude?

El tema es que cada año pone 10-12 millones de euros y es mucho dinero. El problema en el ciclismo es que no es como en el fútbol, donde los espectadores pagan un dinero y hay unos derechos por televisión para los equipos. En el ciclismo no hay esas entradas de dinero y por ejemplo IAM pone 10 millones sin ni tan siquiera un retorno publicitario. Es un dinero que pierdes. Yo creo que la UCI y los organizadores del Tour o del Giro deben reunirse para hablar del futuro del ciclismo porque así es muy difícil seguir.

El de IAM es dinero privado. Se hace una publicidad para IAM, que es una empresa de gestión de fondos para sus clientes. Pero no busca publicidad, no la necesita para desarrollar su actividad. Da su dinero cas&bs;i por afición, aunque sí busca una buena imagen y es bueno para el ciclismo encontrar un sponsor así, que aporta dinero por placer, no por un interés. Se demuestra que el ciclismo es un deporte que a la gente le gusta, pero no puedes aportar doce millones al año por placer siempre.

¿Y no encuentran un pequeño sponsor a pesar de no haber tenido ningún problema, de su gran Tour y de participar en la prueba las tres últimas temporadas?

El equipo tiene muy buena imagen exterior y solo tenemos que encontrar un pequeño sponsor que ponga poco dinero. Con 2-3 millones es posible que el equipo continúe y ese sponsor tiene la posibilidad de estar en el World Tour y de participar en el Tour. No debería ser tan difícil, el problema es que los plazos son cada vez más cortos.

En un plano más personal, ¿qué diferencias encuentra entre su etapa de corredor y la de director?

Es la continuidad, porque para un corredor que tiene visión de carrera y que ha sido capitán o líder de un equipo no es difícil pasar a desempeñar este trabajo. Es una continuación, aunque es diferente. Un director trabaja desde primera hora de la mañana hasta la noche, mientras que un corredor acaba la etapa recibe el masaje y descansa. Nosotros trabajamos hasta en casa.

¿Y usted se preocupa también de encontrar un equipo para el próximo año?

Yo pienso en el futuro también porque debo trabajar el año que viene y me gustaría seguir en este trabajo, pero ahora yo hago todo lo posible para que este equipo continúe y me concentro en el trabajo que tengo aquí.