Policías bangladeshíes mataron en la madrugada de ayer a nueve presuntos milicianos yihadistas durante una operación «antiterrorista» llevada a cabo en el barrio de Kalyanpur, en la capital de Bangladesh, Dacca, cuando, según dijeron, preparaban otro ataque de envergadura. «Hemos sabido de los servicios de Inteligencia que se estaba preparando un ataque importante. Hemos llevado a cabo esta operación para frustrar ese ataque», dijo el jefe de la Policía Nacional, A.K.M. Shahidul Hoque.

La Policía vinculó a los nueve fallecidos con el grupo Jamaaul Muyahidin Bangladesh (JMB), prohibido en el país y al que responsabiliza del ataque contra un restaurante del barrio diplomático a principios de mes que se saldó con 26 muertos. El inspector general de la Policía, Shahidul Haque, indicó que los supuestos yihadistas abatidos llevaban ropa similar, de color negro, a la de los atacantes de la cafetería.

Del ISIS

«Hemos neutralizado a nueve milicianos», aseguró el comisario de la Policía metropolitana, Sheikh Maruf Hassan, que informó de la detención de una décima persona, que fue evacuada al hospital universitario de Dacca con heridas de bala y dijo ser miembro del Estado Islámico (ISIS).

«Uno de los detenidos asegura ser un miembro del Estado Islámico, pero nosotros creemos que forman parte del grupo Jamaaul Muyahidin Bangladesh (JMB)», explicó.

La Policía bangladeshí cree que tanto el ataque del barrio diplomático como otro que tuvo lugar después fueron llevados a cabo por miembros de JMB, que buscan blandir el emblema de Estado Islámico en el país.