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MANILA

Gobierno y comunistas filipinos reanudan el diálogo de paz en Oslo

El Gobierno y la guerrilla comunista de Filipinas reanudan hoy en Oslo su negociación de paz para intentar poner fin a uno de los conflicto armado más antiguos del Sudeste asiático, que les enfrenta desde hace casi medio siglo y ha causado más de 30.000 muertos.

Delegados del Gobierno de Filipinas y el Frente Democrático Nacional de Filipinas (NDFP), que incluye a los rebeldes comunistas se reúnen mañana en Oslo para intentar poner fin a un conflicto que dura ya 48 años. La reanudación del proceso ha sido una de las prioridades de Rodrigo Duterte desde su elección en mayo aunque no es de la única guerrilla a la que debe hacer frente, ya que el grupo yihadista Abu Sayyaf, de más reciente creación e implantado en el sur, supone en la actualidad su principal desafío armado.

La cita ha sido precedida de la declaración por ambas partes de un alto el fuego y la excarcelación por el Ejecutivo de importantes líderes comunistas para facilitar el entendimiento tras tres años de bloqueo.

«El alto el fuego seguirá el tiempo necesario para garantizar la paz y el éxito de las negociaciones», que en principio durarán hasta el sábado, afirmó Jesús Dureza, consejero del presidente Duterte. La tregua se anunció después de que el viernes fueran excarcelados Benito y Wilma Tiamzon para que participen en el diálogo, aunque volverán a prisión una vez concluya la ronda negociadora.

Hasta 22 rebeldes comunistas han salido de prisión para crear, según el Gobierno, «un clima positivo y de confianza» y demostrar la disposición de Manila a hallar el camino de la paz.

La principal razón de que en 2013 fracasara la anterior ronda negociadora fue la negativa del entonces presidente, Benigno Aquino, a excarcelar a negociadores comunistas, lo que condujo a la interrupción del proceso.

El interlocutor del Gobierno en Oslo será el NDFP, controlado mayoritariamente por el Partido Comunista, fundado en 1968 y cuyo líder, José María Sison, permanece exiliado en Países Bajos y que se mostró optimista sobre la negociación, que cuenta con la mediación de Noruega.

La reanudación del proceso ha estado precedido de encuentros exploratorios en los que se fijó una hoja de ruta que incluye alto el fuego permanente, amnistía para los presos comunistas y crear mecanismos que apuntalen el fin de las hostilidades.