Ainara LERTXUNDI
INFORME DE UNICEF SOBRE MENORES MIGRANTES

«Sueños rotos» en la frontera con EEUU tras atravesar Centroamérica

Casi 26.000 menores no acompañados y cerca de 29.700 personas que viajaban en familia, la mayoría mujeres con niños pequeños, fueron detenidos en la frontera entre México y EEUU en los primeros seis meses de 2016, según un informe de Unicef en el que alerta de los «enormes riesgos» que enfrentan durante el largo trayecto.

Wilmer dejó su país, El Salvador, en febrero de 2015 con el deseo de llegar a EEUU y dejar atrás las amenazas de las pandillas. Fue detenido en Ciudad de México y, tras diez días en prisión, lo deportaron. Nering, hondureño de 15 años, tiene decidido irse a EEUU por la violencia diaria que padece en su barrio. Unos desconocidos atacaron y mataron a su hermana. Alexis, también de Honduras, perdió una pierna persiguiendo el «sueño americano». Vive en una choza de hierro y madera construida en una pendiente. Su madre y sus hermanos realizan trabajos temporales cosechando chiles o ayudando en puestos de comida.

Sus relatos forman parte del informe «Sueños rotos: El peligroso viaje de los niños centroamericanos a Estados Unidos», que ayer presentó Unicef.

En él denuncia que en el primer semestre de 2016 casi 26.000 niños no acompañados y cerca de 29.700 personas que viajaban en familia fueron detenidos en la frontera estadounidense. La gran mayoría procedía de El Salvador, Guatemala y Honduras, países en los que se registran algunas de las tasas de homicidio más altas del mundo.

«Es desgarrador pensar en esos niños, la mayoría de ellos adolescentes, aunque algunos son incluso más jóvenes, haciendo el viaje agotador y extremadamente peligroso en busca de seguridad y una vida mejor. Este flujo destaca la importancia de abordar la violencia y las condiciones socioeconómicas que imperan en sus países de origen», subraya el director ejecutivo adjunto de Unicef, Justin Forsyth. Gran parte de los adultos y menores detenidos en la frontera son deportados.

Advierte de que «el riesgo de que estos niños no acompañados sean secuestrados, víctimas de tráfico, violación, o asesinados durante el trayecto es enorme». Amnistía Internacional estima que hasta 6 de cada 10 mujeres y niñas son víctimas de violencia sexual durante el viaje. Muchas de estas niñas terminan en prostíbulos y bares de México y Guatemala.

«Hay que recordar que los niños, sea cual sea su condición, son ante todo niños. Tenemos el deber de mantenerlos a salvo en un ambiente saludable y enriquecedor», subraya Forsyth.

 

Aumenta un 23% el número de migrantes muertos

El número de migrantes muertos en el mundo aumentó un 23% hasta 3.700 casos, la gran mayoría en el Mediterráneo, durante los primeros seis meses de 2016 respecto al mismo periodo de 2015, según la Organización Internacional de las Migraciones (OIM).

De las 3.700 muertes, el 78% fueron en el Mediterráneo cuando en 2015 representaron un 60%. La gran mayoría de los casos se produjeron en la ruta del Mediterráneo Central (Libia-Italia).

En la ruta del Mediterráneo Occidental (Marruecos-Estado español), entre enero y junio murieron 45 inmigrantes, el triple respecto a los contabilizados en el mismo periodo de 2015.

En cuanto a Centroamérica, más de 200 personas han muerto en este periodo en su intento de llegar a Estados Unidos, aunque el informe de la OIM asume que debe haber muchas más víctimas sin registrar. La mayoría murieron al caer del tren que cruza México, conocido como «La Bestia».GARA