Raimundo Fitero
DE REOJO

Liado

En casi cada cita electoral, en algún canal, se estrena algún artilugio nuevo para hacer algo más amenas esas horas valle entre el cierre de las urnas y los primeros datos oficiales. Llevábamos unas cuantas entregas con el pactómetro rudimentario de La Sexta, pero el domingo nos ha dejado una anécdota muy aleccionadora. Matías Prats con problemas con una pantalla táctil que debía ir incorporando nuevos datos. En pleno recuento, cuando las mesas de tertulianos ya estaban recibiendo los argumentarios de sus partidos de referencia y ahí, en pleno caos, con una entereza digna de su profesionalidad, iba intentando reconstruir, resetear la pantalla siguiendo las instrucciones que le daban por el pinganillo. Dio datos de memoria, lo llenó de minutos de oro para los programas de zapping y se mostró pletórico al decir «deja, deja, que esto lo arreglo yo».

Eso es. Así debe actuar un líder de audiencias. Yo creo que Pedro Sánchez vio este episodio y se dijo, ni reseteo el partido, ni hago caso a los del PPSOE que están esperando sus migajas, ni les como ni me dejo comer y exclamó: «Esto lo arreglo yo”, y emuló a los toreros legendarios cuando sufrían una cornada y se levantaban ensangrentados y rebozados en arena y decían enfebrecidos: «Dejadme solo». Y ahí está solo, en compañía de su directiva, intentando algo que nadie sabe exactamente qué es, pero que se ha decidido desde la derecha suya y la derecha mediática, que es malo lo que hace, que es solamente para solucionar su problema personal dentro del partido. ¿Tiene otra salida el partido zombie que la propuesta por su secretario general? La caída de votos es culpa de Sánchez o lo es de Rubalcaba, Zapatero y todo los empotrados de la caspa más reaccionaria que le antecedieron? Vaya, me he liado y mucho, más que Matías Prats, aunque no se si un poco menos que Sánchez.