Iñaki VIGOR

IRUñEA APORTA CIENTOS DE PRUEBAS DE APOYO A LA QUERELLA CONTRA EL FRANQUISMO

La Oficina de Información sobre Memoria Histórica de la represión franquista en Iruñea ha recogido cientos de pruebas sobre fusilamientos y otras formas de represalia. Servirán para apoyar la querella contra el franquismo impulsada por el Ayuntamiento.

Un total de 306 vecinos de Iruñea, de los que 304 eran hombres y 2 mujeres, fueron ejecutados o murieron en cautividad durante el franquismo por motivaciones políticas. De todos ellos, solo cuatro habían tenido un juicio previo y la correspondiente sentencia,

Este dato ha sido recogido en el informe pericial sobre vulneraciones de derechos humanos sufridas por la población de Iruñea entre 1936 y 1939 y en la época franquista, realizado por el equipo de investigación de la UPNA ‘‘Recuperando memoria berreskuratzen’’. El trabajo fue presentado ayer por Joseba Asiron y Emilio Majuelo, doctor en Historia Contemporánea y director de la citada oficina, y tiene su origen en el acuerdo adoptado por el Ayuntamiento de Iruñea el 27 de noviembre del pasado año para querellarse contra los crímenes del franquismo. Fue la primera ciudad del Estado en tomar una iniciativa de este tenor, y posteriormente se han sumado ocho más: Gasteiz, Zaragoza, Madrid, A Coruña, Barcelona, Cádiz, Valencia y Rivas. Delegaciones municipales de todas ellas mantendrán mañana una primera reunión en la capital navarra para analizar estrategias conjuntas.

Según informó Majuelo, tras cuatro meses de trabajo en la oficina abierta por el Ayuntamiento de Iruñea se ha constatado que 1.310 vecinos de la ciudad fueron represaliados y sufrieron vulneraciones de derechos humanos. La cifra es una primera aproximación, ya que existen otros 451 casos sobre los que se tiene noticia pero aún no se han podido validar, y cientos más que probablemente saldrán a la luz gracias a este trabajo.

Además de asesinatos, muertes en cautividad, desplazamientos, etcétera, el informe incluye también testimonios sobre agresiones de género, represión económica y laboral, represión lingüística y cultural y tortura y agresiones físicas, dejando claro que las cifras no son sumables porque una misma persona pudo sufrir una o varias modalidades represivas.

En cualquier caso, el dato de las 306 personas asesinadas o muertas en cautividad refleja el grado que alcanzó la represión franquista, si se tiene en cuenta el censo de la época, y todavía es más significativo el hecho de que solo cuatro de ellos fueran fusilados tras sentencia previa.

«Los otros 302 vecinos fueron asesinados sin dar información pública de ello a sus familiares. Estos se fueron enterando, en diferentes momentos y por diferentes medios, de la suerte que habían corrido esas personas», constata el citado informe.

Más de un millar de presos

Otro dato significativo es que hubo 1.014 vecinos de Iruñea que fueron apresados por motivos políticos durante aquellos años, de los que 867 eran hombres y 147 mujeres. Según las cifras de la base de datos del Fondo Documental de la Memoria Histórica de la Represión en Navarra y los testimonios recogidos en la Oficina de Información abierta en Iruñea, 806 fueron encerrados en la prisión provincial (668 hombres y 138 mujeres), y el resto quedaron retenidos en comisarías o cuarteles locales (111 casos), campos de concentración en el exilio (84 casos), cárceles locales o de partido judicial, centros improvisados de detención, campos de concentración en el Estado español y batallones de trabajo. «Si quiere, el juez tiene aquí elementos de sobra para tramitar la querella contra el franquismo», afirmó el historiador navarro.

En cuanto a la represión económica, se recogen 159 casos validados. Además, al menos 225 vecinos de Iruñea tuvieron que desplazarse al exilio (133 casos verificados), al destierro forzoso (7 casos) o huir a la zona republicana (85 casos).

Finalmente, en lo que respecta a la represión de género, el informe señala que todavía falta mucho por investigar en este terreno y los escasos datos de que se disponen «chocan con la amplitud de los testimonios recogidos».

Desde su apertura el pasado mes de mayo, la Oficina de Información de la Memoria Histórica sobre la represión franquista de Iruñea ha abierto 176 nuevos expedientes. Para validar su trabajo, ha revisado todas las investigaciones realizadas hasta ahora en este campo y los datos obtenidos en diversos archivos durante las últimas décadas. «Hubo una represión mucho más diversa y generalizada de lo que hasta ahora sabíamos», reconoció Emilio Majuelo.

Así, en el conjunto de Nafarroa se ha confirmado que, entre julio de 1936 y abril de 1939 hubo 15.485 prisioneros por motivaciones políticas. Sin embargo, desde abril de 1939, y hasta noviembre de 1975, no existe información exhaustiva sobre las personas apresadas, y todavía faltan muchos datos por recoger sobre la represión franquista en esas tres décadas y media del pasado siglo.

«Hasta que haya un cambio de rumbo en la política general archivística que permita a los investigadores acceder a la documentación y se impulsen proyectos de investigación colectiva que den cuenta de lo sucedido en esas décadas, seguirá habiendo conocimientos insuficientes sobre la represión franquista –precisó Majuelo–, por lo que habrá que seguir investigando».