Arnaitz GORRITI
Baloncesto Liga ACB Endesa

Aplastamiento taronja para los hombres de negro

Sin aportación de los bases ni del banquillo, dos buenas rachas de Valencia Basket decidieron el partido.

VALENCIA BASKET 83

RETABET B. BASKET 61

 

Fuera de los play offs, le cuesta un horror a RETAbet Bilbao Basket cada visita a Valencia. Aplastados en el puesto de base y en el puesto de pívot, los hombres de negro no fueron rival para un Valencia Basket que, pese a sus bajas, se mostró muy superior, rematando el partido en el tercer cuarto.

La falta de entrenamientos de calidad a cuenta de su odisea de regreso de Lituania, amén de un indisimulable cansancio en varios momentos, le pasó factura al cuadro de Carles Durán. Pero por ser paradigmático, el puesto de base fue la mayor cruz bilbaina. Entre Tabu y Borg sumaron 5 puntos, 3 rebotes, 3 asistencias y una valoración de -7. Diot y Vives –sin contar los 8 tantos que aportó Van Rossom– firmaron 21 puntos, 7 rebotes 9 asistencias y 39 de valoración.

Sufrieron los vizcainos desde el inicio, de forma que el 36-30 del descanso no era una mala noticia. Si Will Thomas no hubiera tenido el apagón anotador que tuvo después de su gran inicio, el duelo hubiera quedado visto para sentencia. En cambio, al digno arranque bilbaino le sobrevino un parcial de 13-0 que hizo pasar el marcador de un 15-16 a un 28-16, con el citado Will Thomas como ejecutor y dominador absoluto de la pintura y el rebote, junto con Kravtsov.

En el bando bilbaino los relevos no asomaron en La Fonteta –8 puntos, por 46 de Valencia Basket–, de forma que la anotación bilbaina recayó sobre el lomo de Michael Eric y un Mumbrú menos opaco que en Vilna. Con todo, conforme se sucedían los fallos en el tiro del bando local, la diferencia se fue limando, pero Valencia Basket supo variar su ataque y buscar canastas a través de penetraciones –sendos matazos de Will Thomas y Kravtsov– y tiros libres, asegurando el 36-30 camino a vestuarios.

Parcial de 18-2

Dos triples seguidos de Bamforth parecían meter definitivamente a Bilbao Basket en la reanudación. Los taronja, después de la tercera falta de Kravtsov, se hallaban ganando 46-41 y alguna incertidumbre. Pero en estas entraron en juego Guillem Vives, Will Thomas y Oriola, y el partido se acabó para los hombres de negro.

Sendos tiros libres de Todorovic y Mumbrú fueron los únicos dos puntos bilbainos hasta el cuarto período, mientras que en el bando valenciano Vives, Diot y Rafa Martínez se ponían las botas, liderando un parcial de 18-2. Del 46-41 se pasaba al 64-43 con el que empezaba un último cuarto completamente de sobra. Ni la técnica que se hizo pitar Carles Durán surtió efecto.

Quedaba el intentar maquillar el resultado, algo que, de la mano de Mumbrú, Bamforth y Eric, parecía al alcance. Con 76-61, Valencia Basket parecía firmar el armisticio, pero los hombres de negro emborronaron aún más su partido, engordando la renta taronja con faltas de lo más absurdas, que pueden pesar en el average de cara a la Copa.

 

A Sevilla, «al máximo de intensidad»

El Real Betis Energía Plus, que así se llama ahora el histórico Club Baloncesto Sevilla, es el nuevo contrincante en el loco calendario de Saski Baskonia. Después de quitarse un peso tremendo de encima al superar a Galatasaray, los de Sito Alonso afrontan a partir de las 12.30 un partido, sobre el papel, bastante más relajado.

No obstante, en el seno baskonista son muchas las interrogantes que siguen abiertas, sobre todo tras comprobar la errática rotación de Sito Alonso del pasado viernes. Voigtmann empezó imperial para desaparecer; Bargnani «escaló el Mortirolo» con su bici estática –chanza a la que hasta la afición gasteiztarra recurre– durante la primera mitad para anotar 9 puntos seguidos en el tercer cuarto y casi desaparecer; Beaubois pasó de lesionado a hombre clave, y Budinger de hombre lesionado a hombre cargado de personales. Asimismo, habrá que ver si el bajón de acierto evidenciado por Larkin, Shengelia y Hanga repunta, y si las buenas prestaciones de Kim Tillie e Ilimane Diop –y Rafa Luz, en menor medida–, se repiten o vuelven a caer en alguna zona oscura.

Se palpa menos tensión entre bambalinas, pero aún se está lejos de la saludable velocidad de crucero, por mucho que el cuadro sevillano, que transita en la parte baja de la tabla con un balance de 3-6, resulte un rival más que asequible. Curándose en salud, Sito Alonso prefería alertar en la previa que el partido del polideportivo San Pablo es de «máxima dificultad».

El preparador de Monzón aseguró que el cuadro entrenado por Zan Tabak «tiene una seriedad muy grande a nivel defensivo», por lo que pedía a sus jugadores que mantengan «la misma intensidad» que el Betis «para poder llegar al final del partido con la solvencia» que necesitan.

Alonso insistía en que su equipo tiene que jugar «al máximo de intensidad», ya que reconocía que el «Baskonia tiene que mejorar en la Liga ACB Endesa».A. G.