GARA
bilbo

Queda en libertad el preso de Galdakao Tomás Madina

El preso de Galdakao Tomas Madina Etxebarria recobró ayer la libertad después de permanecer encarcelado dos años y medio. Familiares y amigos le aguardan a las puertas de la prisión de Foncalent, en Alacant.

El galdakoztarra Tomas Madina Etxebarria está desde ayer junto a los suyos después de pasar los dos últimos años y medio en prisión, acusado inicialmente por la Guardia Civil de un supuesto intento de atentado contra Patxi López y Rodolfo Ares que en su día desmintió ETA y que sostuvo toda la causa judicial contra él.

Ayer, en torno a las 11.00, abandonó la prisión alicantina de Foncalet, a cuyas puertas le aguardan su compañera y sus dos hijos, junto con otros familiares y amigos desplazados desde Euskal Herria, con los que emprendió el camino de regreso a casa. A primera hora de la noche, el represaliado fue recibido en Galdakao con numerosos vecinos que pudieron abrazarle y celebrar su liberación. En los próximos días, tendrán lugar nuevos actos para recibirle.

La detención de Madina fue muy mediática a raíz de los hechos que le trataron de imputar. Al ser arrestado en junio de 2014, la Guardia Civil le acusó de un intento de atentado contra los entonces lehendakari, Patxi López, y el consejero de Interior, Rodolfo Ares, por lo que se enfrentó a una petición de cárcel de 40 años.

Finalmente, la Sección Tercera de lo Penal de la Audiencia Nacional calificó esa acusación de «hipótesis policial» y esta se desvaneció, aunque condenaron a Tomás Madina a siete años de cárcel por «pertenencia a ETA» al estimar acreditado que el ya expreso vasco «es, desde al menos 2008 hasta que fue detenido el 10 de junio de 2014, miembro integrante ‘legal’ de la organización terrorista». Respecto al presunto intento de atentado contra López y Ares, años antes del arresto del galdakoztarra, la organización vasca negó esa acción que fuentes policiales le atribuían.

Los magistrados expusieron en su sentencia que «en modo alguno se ha probado la participación» de Madina Etxabarria en aquel plan. Se apuntó a que ni siquiera había aparecido el fusil de mira telescópica con el que, según la acusación fiscal, iba a disparar contra Patxi López y Rodolfo Ares desde el bilbaino parque Larreagaburu durante el homenaje al inspector de Policía Eduardo Puelles, muerto a manos de ETA.