Mertxe AIZPURUA
INFORME PISA 2015

DE FINLANDIA A SINGAPUR, PISA SACUDE EL ORBE EDUCATIVO

Se da a conocer cada tres años y, como mínimo, algo se revuelve en el sector educativo y en las administraciones públicas. La sacudida la produce la OCDE al hacer públicos los resultados del informe PISA, el estudio que evalúa y compara los sistemas educativos del planeta. Nadie puede negar que la educación es uno de los principales indicadores del progreso de un país y el informe PISA se ha convertido en una suerte de liga global con podium y clasificaciones, a las que miran, fundamentalmente, los responsables políticos.

Si los datos del informe PISA son buenos para el país o comunidad, miel sobre hojuelas para los gobernantes. Si han decrecido respecto a los precedentes pero el nivel se mantiene en posiciones dignas, se expresa una moderada preocupación, pero si las tendencias a la baja, por lo general, ya atisbadas, se confirman, puede llegar la debacle. Entonces se abre paso el «shock PISA», término acuñado en Alemania en 2001 al quedar por debajo de la media en todas las competencias.

A partir de ahí, el pobre resultado motivó encendidos debates y la implementación casi inmediata de reformas con más horas lectivas que redundaron en un mejor posicionamiento de los estudiantes alemanes, aunque ahora el centro del debate está en la calidad de vida de los estudiantes. Las asociaciones de padres se quejan porque dicen que los jóvenes están más estresados, tienen menos tiempo para practicar actividades extracurriculares y estudian los temas de una manera más superficial.

Aquí, el terremoto PISA 2015 se ha dejado sentir en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa. Los resultados del informe se recibieron como un mazazo al otorgar a la comunidad autonómica los resultados más bajos de su historia desde que sus estudiantes se incluyeran en las pruebas, en el año 2003. Los datos sobre la competencia científica y la comprensión lectora del alumnado han sufrido una notable caída con respecto a la medición anterior, en 2012, y se han situado por debajo de la media de la Unión Europea y de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). En matemáticas, la otra materia analizada, los estudiantes de la CAV mejoran ligeramente el dato de los países que integran la OCDE, pero no el de la UE y, en cualquier caso, es el peor dato propio.

Por contraposición, en Nafarroa el informe PISA 2015 sitúa a esta comunidad a la cabeza de Europa (donde sigue como líder Finlandia), dentro de los diez primeros puestos de los 72 países de la OCDE, y muy por delante de la media europea y de las estatales francesa y española en las tres materias. En la comparativa de Ciencias, Nafarroa puntúa con 512 cuando los promedios de la UE y la OCDE están en 493.

La polémica ha vuelto a encenderse en la CAV tras las medidas anunciadas por la consejera Uriarte para hacer frente a los malos resultados. Otros estudios ya indicaban que la línea iba en acusado descenso y la inacción ante la evidencia es una de las acusaciones más reiteradas al Ejecutivo autonómico desde expertos de la comunidad educativa.

Los mejores situados

En la clasificación general acostumbran a ocupar los primeros puestos países tan diferentes entre sí como Finlandia, Singapur y Corea del Sur, cada uno con sus peculiaridades y sistemas educativos muy diferentes.

Sin duda alguna, el modelo educativo finlandés es referencial y el más reconocido en nuestro entorno, aunque trasladar miméticamente modelos de sociedades tan diferentes nunca es la solución, a juicio de los expertos. En cualquier caso, el país nórdico también sufrió la sacudida de PISA, con la caída de resultados producida en 2012 –pasó del puesto 2 al 12 y fue superada por otros países europeos como Liechtenstein, Suiza o Estonia– aunque siguiera manteniéndose por encima de la media. En la última edición ha retrocedido en las tres áreas evaluadas, aunque todavía obtiene óptimos resultados y continúa situada muy por encima de la media de la Unión Europea y entre los cinco primeros países a nivel mundial.

Precisamente en 2012 se aprobó una nueva reforma del currículo que fue implantada en la educación básica finlandesa en agosto pasado. Los cambios del National Curriculum Framework mantienen la tradicional independencia de colegios y municipios a la hora de implantarlos y tienen como uno de sus objetivos el «desarrollo de los centros educativos como comunidades de aprendizaje», en una atmósfera colaborativa. Esto se traduce en la ya conocida desaparición de asignaturas tal y como las conocemos aquí y su sustitución por el trabajo por proyectos, que tiene como objetivo desarrollar siete áreas competenciales, de manera multidisciplinar, lo que lleva a que varios profesores trabajen con los estudiantes en el mismo aula al mismo tiempo.

En el otro extremo del mundo, Singapur lidera el ranking y lo hace en las tres clasificaciones del informe. Según el informe Talis de la OCDE, su éxito se basa en la preparación, la selección y el reciclaje permanente de los profesores. En su anális de datos de 2013, se indica que un 93% de los maestros participan en talleres y clases de formación anuales, y un 53% de los profesores singapurenses, con edad media de 36 años, participan en redes de colaboración profesional. En los países del este asiático es práctica habitual que los profesores más noveles sean tutelados por un veterano durante los primeros años de ejercicio de la profesión.

Las pruebas han puesto en evidencia el rostro cambiante del mundo de la educación. PISA ha registrado el auge de países y ciudades de Asia, como Corea del Sur, Singapur, Hong Kong y Shanghai, donde la inversión en educación es vista como una manera de acelerar los avances de sus economías.

 

Por debajo de los estados vecinos

En Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, el informe PISA 2015 ha evaluado 3.612 estudiantes de un total de 119 centros públicos y concertados. La selección ha sido más reducida en ese ejercicio, ya que en el anterior informe PISA participaron 4.739 alumnos de 174 centros. En la materia de competencia científica, el descalabro de la CAV es de antología, con una bajada de 23 puntos. Se ha pasado de 506 puntos en 2012 a 483 en 2015, lo que supone quedar 10 puntos debajo de la media de la OCDE y de los Estados francés y español (495 y 493, respectivamente); en comprensión lectora (-7) se baja de 498 a 491 (a 2 puntos de la OCDE y a 8 y 5 de las medias francesa y española) y en matemáticas se desciende de 505 a 492 (-13) que es la media de la OCDE; única puntuación que se sitúa por encima de la media del Estado español (486) pero por debajo de la media en el Estado francés (499).

 

4 preguntas básicas

1• ¿Qué es PISA?

Es la prueba trianual que realiza la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) para evaluar los sistemas educativos de los países o comunidades autonómicas que acceden a la evaluación de forma voluntaria. Se realiza a estudiantes de 15 años, independientemente del curso en el que estén. El último informe se ha hecho en 72 países. PISA analiza la competencia lectora, matemática y científica, y en cada edición se da mayor peso a una de ellas, en esta última a la científica.

2• ¿Qué es la OCDE?

Es una organización intergubernamental que agrupa a 35 estados. El enunciado de su misión es la de «promover políticas que mejoren el desarrollo económico y el bienestar social de personas en todo el mundo». Abordan temas educativos, pero también ofrecen mediciones de productividad, flujos globales de comercio, pronostican tendencias y fijan estándares internacionales en un amplio abanico de temas de políticas públicas.

3• ¿Qué evalúa PISA?

No son los conocimientos del alumnado sino las competencias; es decir, cómo se aplican los conocimientos en problemas que puedan surgir en la vida real. Se insiste en que el objetivo no es evaluar a los estudiantes sino el sistema educativo y analizar su funcionamiento.

4• ¿Quién elabora la encuesta?

Las preguntas se eligen por unanimidad de todos los países participantes en la evaluación y un comité internacional de asesores. Se prueban en un test previo que sirve para valorar si son adecuados.