Real y Athletic no compiten solo en el terreno de juego durante 180 minutos cada temporada. Sus responsables directivos y deportivos también lo hacen el resto del año por conseguir que sus clubes tengan las mejores plantillas y sus filosofías deportivas les convierten en sus principales rivales en este objetivo.

GARA ya informó a inicios de temporada de todos los detalles que rodearon el intento del Athletic de fichar a Mikel Oyarzabal y del malestar del Consejo de la Real porque se registren contactos con jugadores de su primer equipo incluso fuera del plazo establecido por la FIFA.

La Real ha conseguido que no solo Oyarzabal, sino que todos los futbolistas importantes que han tenido la opción de ir al Athletic hayan decidido quedarse, pero la competencia no se limita a los jugadores ya formados. Ahora el principal terreno en el que se enfrentan los responsables de los dos equipos es con el intento del Athletic de tener al menos un equipo convenido en Gipuzkoa, como lo tuvo con el Eibar y el Antiguoko.

Renovación automática

Todos los clubes de fútbol de Gipuzkoa tienen convenios con la Real, que aporta una parte importante de sus presupuestos con el apoyo de la Diputación. Esos contratos expiran el 30 de junio, pero se renuevan automáticamente si ninguna de las partes comunica lo contrario.

Antiguoko y Eibar han trasmitido a la Real que no quieren renovar el contrato en las condiciones actuales, pero eso no implica que no vayan a seguir convenidos con el club que ha asumido la responsabilidad de liderazgo del fútbol guipuzcoano y que contribuyó al ascenso azulgrana con el fichaje de jugadores para su posterior cesión y al asumir más costes que no se limitan solo a los jugadores.

Por fortuna ahora los dos clubes están en Primera y eso ha llevado al Eibar a reclamar un liderazgo compartido. La Diputación, cuyo diputado de Deportes fue explícito en una entrevista a Teledonosti, y la Federación Guipuzcoana defienden la organización actual, que da buenos resultados. La avalan no solo la cantidad de jugadores que llegan al primer equipo de la Real, también la cantidad de equipos juveniles y cadetes que ascienden a las máximas categorías.

El caso del Antiguoko es distinto. Se ha publicado que existe un acuerdo con el Eibar y el propio presidente del club donostiarra, Edorta Salegi, declaró la semana pasada en una entrevista en Cope Gipuzkoa que ha mantenido una reunión con el director deportivo del Athletic, José María Amorrortu, pero negó que se hablara del convenio, y señaló que su voluntad es seguir convenido con la Real, que también pretende lo mismo.

El Mariño y la opción de fichar jóvenes de Iparralde

Aretxabaleta y Mariño han trasmitido que han recibido ofertas del Athletic y se publicó que quiere convertir al equipo de Irun en su centro de formación en Gipuzkoa. Es un club que no ha destacado en el fútbol base y el Real Unión es el referente de una localidad que está bien situada si busca responder a la normativa de la FIFA que impide a los clubes profesionales fichar jugadores menores de 16 años que no vivan en su Estado.

La Real se ve beneficiada de una excepción por la que esos menores sí pueden jugar en un club de otro Estado si viven a menos de 50 kilómetros de su límite siempre que su centro de formación esté también a esa distancia de esa frontera. Eso permite a la Real fichar jóvenes de Iparralde, incluso de clubes convenidos con el Athletic, aunque si llegara a un acuerdo con el Mariño para formar a esos jugadores habría que ver cómo reacciona la FIFA.

No es fácil para un club guipuzcoano convenirse con el Athletic porque las categorías de iniciación al rendimiento en alevines de segundo año e infantiles dependen de la Diputación, que puede retirar la invitación a los clubes que no estén vinculados con la Real. El Mariño ha trasmitido que no ha firmado con el Athletic y la Real espera que ni ese club ni ningún otro lo haga para evitar que los mejores jugadores de este herrialde fichen por la cantera del Athletic.J.I.