Otro día de lucha para no abandonar los 10.200 puntos. Pese a perder impulso en las dos jornadas anteriores, el Ibex pudo alargar ayer su buen momento con un ascenso del 0,17%, hasta los 10.229,30 puntos. Todo lo contrario sucedía en Fráncfort (con -0,48%), París (-0,15%) y Londres (-0,73%), más penalizados por los temores crecientes ante el posible fracaso de Trump en su intento de aprobar hoy la derogación del Obamacare, la ley sanitaria aprobada en 2015 por su predecesor.

Y esa preocupación es tan solo una de muchas, pese al derroche alcista de Wall Street después de que Trump ganara las elecciones y prometiera reformas fiscales, aumento del gasto, inversiones en infraestructuras, así como medidas para proteger sus industrias y el mercado interior. Los analistas se preguntan cuánto tiempo más hay que esperar para conocer los detalles de sus medidas y si será capaz de llevarlas a cabo. Asimismo, crecen los avisos por las fuertes subidas de los índices neoyorquinos, y los inversores han comenzado a analizar sus estrategias para una bolsa en probable cambio de dirección.

El Ibex se pudo desmarcar del resto de Europa –solo el Mibtel italiano cerró en verde– gracias a los grandes bancos y a Telefónica. BBVA se anotaba un 0,41%; Santander, un 0,42%; y la operadora, un 0,77%. De los pesos pesados, Iberdrola sumó un 1,06%, mientras que Inditex cayó un 0,61% y Repsol, un 0,14%. Los mejores fueron Grifols (+2,67%), Gas Natural (+1,28%) y Bankia (+1,12%). Entre los perdedores, destacaron IAG (-2,72%), Merlin (-1,85%) y Cellnex (-1,75%). Dentro del Cac, las mayores caídas correspondieron a Axa (-1,84%), Société Générale (-1,53%) y Accor (-1,30%). Los títulos de Safran (+1,53%) terminaron al frente de los ganadores.