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La mutación poética de Ferrant

El museo Oteiza ha presentado «Mutación poética. Naturaleza viva en los objetos de Ángel Ferrant, 1945-1950», un espacio de reflexión en torno a la relación entre naturaleza y escultura en la obra de Ferrant a través del proyecto expositivo y el aula experimental que acoge el museo, así como de la edición de una publicación monográfica.

La exposición “Mutación poética. Naturaleza viva en los objetos de Ángel Ferrant, 1945-1950” presenta un conjunto de 60 esculturas, fotografías originales del autor y elementos documentales, que muestran la huella de lo natural en la obra de este artista. La exposición permanecerá en el museo hasta el 28 de mayo.

Este proyecto expositivo, comisariado por Clara Eslava, producido por el museo Oteiza y que cuenta con la colaboración del Ayuntamiento de Egues, la Fundación Caja Navarra y la Mancomunidad Comarca de Iruñea, se centra en una selección de sus “Objetos Hallados”, un conjunto de piezas realizadas en 1945, resultado de la utilización y ensamblaje de materiales encontrados en sus paseos por la playa gallega de Fiobre, como conchas, corchos, guijarros, anzuelos, o maderas de deriva, para «generar un universo pleno de evocaciones y lograr una redefinición de la escultura, fruto de la fusión de gestos de infancia e impulso creativo. Unas obras que operan desde la ambigüedad entre mímesis y metáfora y redefinen la escultura desde lo casual, cambiante, móvil o abierto, principios que Ferrant exploró hasta el fin de su vida», destacan desde el museo Oteiza.

La exposición incorpora fotografías y documentación procedentes del archivo original del artista, hoy depositado en el Archivo Ferrant de la Colección Asociación Arte Contemporáneo-Museo Patio Herreriano, de Valladolid, así como con un conjunto de obras realizadas entre 1945 y 1950.

El proyecto incorpora la edición de una publicación monográfica que incluye un extenso aparataje gráfico y documental, así como dos textos analíticos de Clara Eslava, comisaria del proyecto, y de Aitziber Urtasun, responsable de Didáctica del Museo Oteiza.

Aula experimental

Este proyecto se complementa con la presencia de un aula experimental, destinada al público infantil y adulto, que acogerá las acciones pedagógicas programadas durante el periodo de exhibición de la muestra y que constituye una invitación permanente a la práctica creadora desde la acción lúdica.

En el aula podrán encontrarse materiales de la naturaleza como piedras, maderas u hojas, así como mesas de trabajo, tornos, espacio libre de escritura y zonas con distinta intensidad de luz que favorezcan la actividad. El aula funcionará como área de búsqueda para todo aquel que se acerque a ver la exposición de forma individual, así como zona de trabajo para el profesorado de las escuelas que visiten la muestra.

Como trabajo previo a la exposición, se ha trabajado con el Colegio Público de San Francisco de Iruñea, observando y fotografiando algunas de sus salidas a entornos naturales como la playa de Getaria. Los materiales recolectados en esas salidas se incorporarán al aula experimental como material de trabajo. En la propia aula también albergará materiales de trabajo cedidos por el artista Antonio Eslava y por la Escuela de Arte de Iruñea.