Amaia U. LASAGABASTER
Elkarrizketa
GERMÁN ALBISTEGI
CONSEJERO Y CANDIDATO A LA PRESIDENCIA DEL EIBAR

«Queremos recuperar la transparencia, la cercanía y los valores»

Con la convicción de que el Eibar necesita «recuperar» sus señas de identidad y animado por una parte de la masa social azulgrana que coincide en su diagnóstico, Germán Albistegi ha decidido dar un paso adelante y encabezar una de las tres candidaturas al Consejo de Administración de la entidad. Le acompaña un grupo de «gente de fútbol, apegada al suelo que pisa y con valores fuera de toda duda».

El próximo presidente del Eibar saldrá del actual Consejo de Admnistración, aunque los accionistas decidirán si se trata de Amaia Gorostiza o Germán Albistegi. Compañeros de directiva pero cabeza de dos listas no solo diferentes sino también, si palabras y silencios no mienten, opuestas.

¿Cuándo decide dar este paso y por qué sin sus compañeros de Consejo, de los que solo le acompaña Joseba Rocandio?

En la directiva ha habido diferentes criterios. El año pasado casi convocamos elecciones pero pensamos que quizá fuese perjudicial para el club y decidimos esperar y hacer un proyecto bueno y muy del Eibar. Gente con la que tuvimos conversaciones entonces nos ha preguntado y nos ha animado a seguir adelante. No tenía vocación de presidente pero las circunstancias a veces te colocan en un punto en el que hay que seguir adelante.

Se confirma el cisma que se intuía en el Consejo. ¿Cuáles son las diferencias, aparentemente tan grandes como para desembocar en proyectos opuestos?

Muchas y variadas. En materia de inversiones, después llegó el descenso, el tema de Garitano... En todo grupo humano hay diferencias pero se fueron ahondando hasta que la brecha fue difícil de recomponer. Sobre todo creemos que los valores del Eibar son otros, no nos convencen los que imperan ahora y por eso creemos que es necesario un cambio en el Consejo. Queremos recuperar los valores, la transparencia, la cercanía, que este equipo sea el del pueblo.

No sé si esa brecha tiene que ver con la salida de Álex Aranzabal, pero no se le escapará que se les considera la candidatura «alternativa» o «aranzabalista».

Cuando entré al Consejo hace siete años ni siquiera conocía a Álex Aranzabal. Yo he apoyado cualquier idea y proyecto que me pareciese buena para el Eibar y si resulta que las buenas ideas o estrategias partían de él, claro que apoyaba a Aranzabal.

Se ha rumoreado que su victoria podría suponer su regreso.

No. He dicho claramente y lo sigo diciendo, he mostrado mi admiración por su forma de dirigir el Eibar pero entiendo que su ciclo en el club terminó el año pasado. Con nosotros no va a estar ni en la plancha, ni de consejero, ni de presidente...

Hay otros nombres propios que pueden resultar decisivos. José Luis Mendilibar y Fran Garagarza.

Contamos con ambos. Con Mendilibar tengo un feeling absoluto, fui quien apostó por él como entrenador, frente a la alternativa que planteaban los de la otra candidatura. Hace tres semanas estuve con él y las ideas y el proyecto le gustaron muchísimo. Va a ser nuestro entrenador. También estuve con Garagarza. Llevo trabajando seis o siete años con él en la Comisión Deportiva, nos conocemos muy bien, tenemos una visión del fútbol muy parecida. Le expuse ideas y proyectos y me dijo que estaría encantado de estar con nosotros. Y nosotros con él, con todo su equipo, con lo que haga falta. En ese sentido apostamos por la continuidad, desde una candidatura en la que tenemos un perfil futbolístico muy importante, algo que sirve sobre todo cuando las cosas no van tan bien.

Hábleme, pues, de su candidatura. ¿Cómo la definiría?

Hemos trabajado mucho, primero hablando con la gente y después integrando aportaciones. Ha sido un trabajo importante porque prevemos siete áreas de actuación, con dos consejeros en cada una. No quiero hablar en profundidad del proyecto hasta que no se convoquen las elecciones y hagamos una presentación pero sí puedo decir que somos gente reconocidamente eibarzale, casi todos con pasado en el Eibar y además profesionales, abogados, ingenieros, economistas... Lo que no tenemos son empresarios. Nuestro perfil no es de empresarios, no sé si hechos a sí mismos o de familia, sino de gente apegada al suelo y con unos valores fuera de toda duda.

¿Y qué posibilidades cree que tienen de ganar?

La batalla es difícil. El Eibar tiene 11.000 accionistas pero hay un grupo de control, gente que tiene 6.000, 10.000 euros, que decanta la votación. Por el perfil del Consejo actual, tal vez ese nicho nos sea más complicado, así que tendremos que trabajar mucho. Si la relación fuese una persona-un voto, estoy seguro de que ganaríamos. Vamos a ser optimistas. Ninguna batalla es fácil pero ninguna está perdida.

La candidatura perdedora podría tener menos acciones pero más accionistas a favor. ¿No teme el riesgo de fractura en ese caso?

No debería. Es una democracia y hay unas normas. El que reciba más acciones será el legítimo ganador. Si no somos nosotros, lo aceptaremos y abogaremos por remar todos a una.

También podría resultar un Consejo mixto.

Es una de las cosas que queremos hablar estos días aunque todavía estamos esperando que nos llame el Comité Electoral. Nosotros preferimos que la candidatura ganadora lo sea al completo, queremos un Consejo homogéneo y unido. No quiero ni pensar en formar uno mixto, después de este pasado tan oscuro que vamos a dejar atrás.