GARA
WASHINGTON

La deuda pública de las economías avanzadas, en máximos históricos

En sus últimos diagnósticos, el Fondo Monetario Internacional es muy crítico con las políticas fiscales que vienen implementando los estados más desarrollados económicamente, a los que insta a impulsar estrategias que tengan por objetivo una distribución más amplia del crecimiento entre toda la gente. Y también pone de manifiesto que la renta del 1% más rico ha crecido tres veces más que la del resto de la población durante los últimas tres décadas.

Los niveles de deuda pública de las economías más avanzadas han alcanzado máximos históricos en tiempos de paz tras el paso de la “Gran Recesión”, según los cálculos del Fondo Monetario Internacional (FMI), que insta a los gobiernos de esos estados (el listado completo, en el gráfico anexo) a «entender mejor» los riesgos a los que están expuestos con el objetivo de adoptar estrategias adecuadas para gestionarlos.

En un documento adjunto al informe “Fiscal Monitor 2017”, el director del departamento fiscal del FMI, Vitor Gaspar –en colaboración con el subdirector del área, Luc Eyraud–, subraya que «los rescates bancarios y la profunda crisis económica» han provocado que la deuda pública de las economías avanzadas, que se situó en el 107,6% sobre el PIB en 2016, se encuentre en niveles «sin precedentes en tiempos de paz».

La institución presidida por Christine Lagarde advierte de que las finanzas públicas se encuentran expuestas a «grandes riesgos» que son «infravalorados con frecuencia», tal y como demostró la reciente crisis financiera global. Pero, al mismo tiempo, reconoce que el «endeudamiento excesivo y los niveles récord de deuda pública» limitan los recursos financieros de los gobiernos.

Por ello, la institución con sede en Washington solicita en su informe fiscal –titulado “Conseguir más con menos”– que se adopten políticas fiscales «inteligentes, prudentes, contracíclicas y que favorezcan el crecimiento», con el objetivo de retornar a la senda de la consolidación fiscal que quedó interrumpida en 2016. «La política fiscal tiene que desempeñar un papel más importante en la estabilización económica que en el pasado, porque los bancos centrales en muchas economías avanzadas han rebajado los tipos de interés a niveles próximos a cero y se están experimentando los límites de la política monetaria», insisten Gaspar y Eyraud.

El FMI también reclama políticas fiscales «más inclusivas» con el objetivo de reducir la desigualdad y denuncia que los ingresos del 1% más rico han experimentado un crecimiento anual «al menos tres veces mayor que el del resto de la población durante los últimas tres décadas».

«La política fiscal tiene un papel importante para asegurar que los beneficios del crecimiento se reparten más ampliamente entre la población», reza el informe fiscal del FMI, que sostiene que, en la mayoría de las economías avanzadas, la política fiscal ha sido cada vez «menos efectiva» en el desempeño de este papel durante los últimos veinte años.

«La reducción de la generosidad de los beneficios sociales, junto a una carga tributaria menos progresiva, han reducido la capacidad de la política monetaria para estrechar la disparidad en los ingresos desde mediados de los años noventa», agrega.

Además, el FMI advierte de que los «excesivos y crecientes» niveles de desigualdad e incertidumbre son «perjudiciales» para el bienestar y el crecimiento, por lo que propone mejorar la canalización de las ayudas a los hogares, instaurar un sistema fiscal más progresivo y mejorar el acceso al mercado laboral y a la sanidad pública en el marco de una serie de reformas estructurales.

Alemania acumula ahorros

Por su parte, el Gobierno alemán estima que entre 2008, cuando se desató la crisis financiera, y 2016 se ahorró 145.700 millones de euros en el pago de los intereses de la deuda con respecto a sus propias previsiones presupuestarias. Esta es la principal revelación de la respuesta del Ministerio de Finanzas a una interpelación parlamentaria de Los Verdes en el Bundestag que fue difundida por el diario económico “Handelsblatt” en su edición digital.

La crisis de la deuda en los estados periféricos de la eurozona hizo que los bonos alemanes, considerados un activo refugio, fuesen más apetecibles para los inversores, que estaban dispuestos a adquirirlos a unos tipos de interés más bajos, por lo que han llegado a ser negativos.