La trascendencia de los puntos no es la misma para Alavés o Athletic, pero esa circunstancia no va a desmerecer la rivalidad que se verá sobre el césped de Mendizorrotza mañana. «Clave» para los rojiblancos en su lucha por ocupar un puesto europeo e «importante» para los anfitriones en su camino por llegar en el mejor momento de forma posible a la final copera.

«Me imagino un partido similar al del Eibar, con mucha disputa. He notado en mis futbolistas las ganas de jugar este encuentro, en el que tenemos que disfrutar. Será importante para medir nuestras fuerzas», explicó Mauricio Pellegrino, quien despejó cualquier posible especulación y que no tiene pensado realizar probaturas y sí mantener el estilo de juego de la temporada.

Con mayores urgencias, aunque positvas, el míster de los visitantes, Ernesto Valverde, no dudó en calificar el choque de «clave», en la pugna por jugar competición continental la próxima campaña. «Ganar en Vitoria nos daría mucho. Tenemos que mirar de reojo a los otros partidos, pero estamos en lo de siempre, tendremos que ganar el nuestro», indicó Txingurri.

Como suele ocurrir en estos casos, el cruce de halagos entre técnicos también estuvo presente en la previa del derbi. Así, Pellegrino destacó el «espíritu de equipo» del Athletic, cuyos jugadores «son fuertes en el juego aéreo, a balón parado y muy completos». «Es un equipo que, aparte de intensidad, tiene calidad para crear problemas». No se quedó atrás Valverde en su valoración del ejercicio del Alavés en su regreso a Primera. Reconoció sentirse «sorprendido» por el buen rendimiento del conjunto albiazul, al haber confeccionado una plantilla «competitiva hasta el final» y que «rentabiliza muy bien los goles que marca», a la par que «le marcan pocos», entre otras cosas porque «defiende bien los centros laterales».

Urrutia, «soporte y parapeto»

Valverde, que no suelta prenda sobre su futuro, tuvo que hacer frente de nuevo a esta cuestión. El de Viandar de la Vera lidió las preguntas poniendo en la balanza como aspecto prioritario la marcha del equipo y sus opciones de jugar otra campaña más en Europa. «¿Qué hay más importante que eso?», se preguntó el preparador rojiblanco, quien se deshizo en elogios hacia la actitud del máximo dirigente del club vizcaino, Josu Urrutia.

«Nuestro presidente es una roca y se lo tenemos que agradecer. El hecho de que esté siempre como soporte nuestro es increíble, es lo mejor que tenemos. A pesar de que la prensa es muy crítica con él, es quien tiene que aguantar el tirón. No tiene que salir y dar noticias todos los días, sino dar estabilidad para trabajar bien», comentó.