A falta de un explícito «Valverde quédate» de la grada de San Mamés en el último partido, el técnico rojiblanco recibió este lunes uno de los premios ‘Angulas de la Ría’ en el aniversario de una publicación local que galardonó, entre otros, también a Fito Cabrales, que a lo mejor le cantó al oído al Txingurri aquello de «todas las cosas que soñé, todas las noches sin dormir, todos los besos que enseñé, y cada frase que escondí, y yo jamás te olvidaré, tú acuérdate también de mí, nunca se para de crecer, nunca se deja de morir». Mientras desde Barcelona insisten cada vez más en que lo del técnico del Athletic está más que hecho, y ayer el presidente culé, Josep Maria Bartomeu, se limitó a decir que «estamos trabajando desde hace tiempo en el nuevo entrenador» y que «el club hace tiempo que trabaja en la planificación», aquí en Bilbo solo cabe esperar a que los protagonistas se decidan a poner las cosas negro sobre blanco. Y eso pasa por el anuncio del adiós de Valverde, sea para irse a Can Barça, sea a otra Liga o sea, como incluso se habla, tomarse un año sabático.

A la espera de una puesta en escena que todo indica no será antes del partido que cierre la temporada en el Calderón, diferentes actores aguardan con calma tensa la caída de la primera ficha de este dominó que defina el organigrama rojiblanco cara a la nueva campaña. La marcha de Txingurri deja una vacante en el banquillo de San Mamés para la que tiene boletos Cuco Ziganda, siempre que triunfen las tesis del presidente Josu Urrutia. Una apuesta por la continuidad no exenta de riesgos, como con cualquier otro proyecto, pero diferentes seguramente a los que entrañarían la llegada de un entrenador de fuera de Lezama.

«El año que viene Dios dirá qué es lo que pasa. Todo va a ser bueno y en ese sentido no he sentido un cosquilleo o al revés», es de lo poco que el aludido soltó en su última comparecencia tras el partido del Bilbao Athletic ante el Toledo. «Espero que este año nos haya servido para saber todo lo que podemos aprender y mejorar y el largo camino que nos espera a todos, yo también me incluyo», añadió el hombre que está en muchas las quinielas para tomar las riendas del primer equipo.

Una ficha que obliga a mover otra ficha y esta a su vez otra. Y aquí empiezan a sonar nombres en los mentideros de Lezama para dirigir al filial bilbaino ante la posible ausencia de Ziganda, y uno de ellos no es otro que el de Jon Pérez Bolo, actualmente al frente del Arenas de Tercera, aunque el club arenero le habría ofrecido ya la renovación. Sería un exleón más para el organigrama de la cantera de Lezama de confirmarse todo este puzzle todavía por extender sobre la mesa.

Uno que llegaría y otro que saldría. Todo apunta a que Joseba Etxeberria puede ser el próximo entrenador del Amorebieta, con lo que dejaría libre la dirección del Basconia. El club vizcaino está inmerso en una lucha de poder, y los actuales dirigentes quieren al elgoibartarra en el banquillo y al ex del Amorebieta y actual jugador del Getxo Asier Goiria en la dirección deportiva de la entidad. Por cierto, el destino inmediato del hasta ahora técnico de los zornotzarras, Aitor Larrazabal, puede ser el Barakaldo.

Recambios previstos para el primer equipo, también para el filial, quedaría por despejar la incógnita de quién se haría cargo de las riendas del Basconia y aquí aparece el nombre del hasta este curso entrenador del Sodupe, Andoni Galiano. A sus 39 años, fue lateral zurdo en el Bilbao Athletic en sus tiempos de jugador, prosiguió su andadura en el Real Unión, Cultural Leonesa y Portugalete. En el banquillo del club encartado ha cumplido su cuarta temporada, dejando a los del Hurtado de Saratxo con el ascenso a Tercera en la mano tras un gran año.

Mucho trabajo el que tiene encima de la mesa un José Mari Amorrortu en la dirección deportiva, del que se había especulado con la dudosa posición en la que quedaría en caso de que fuera Ziganda el destinado a asumir la batuta del Athletic. No obstante, el propio Josu Urrutia avaló su labor en su reciente comparecencia, haciéndole partícipie de los logros del equipo y de Lezama. Trabajando a destajo para confeccionar el organigrama deportivo del club, como de las plantillas. Elustondo y Saborit acaban contrato como Iraizoz y no se tiene noticias de ninguna oferta de renovación, por lo que habría que suponer que se les ha trasladado el final de su relación como se hizo con Iraizoz hace dos meses.

Salidas, veremos si no las únicas, lo mismo que llegadas. No solo hablamos de posibles refuerzos, donde saltan los nombres de los sabidos Berenguer o Mikel Merino, sino equilibrios también para decidir el futuro de los cedidos, caso de Unai López, Mikel Vesga o Ager Aketxe, sin olvidar la papeleta con Iago Herrerín, que ha dejado entrever que no volverá para ser suplente a sus 29 años y máxime tras haber probado las mieles de la titularidad en Leganés.

Lo que parece claro es que la temporada habrá acabado este domingo para el Athletic solo en el césped, porque en los despachos el ajetreo va a ser mayúsculo, nada que ver con el último verano. Comparecencias que parece ser van a suceder en Lezama e Ibaigane en futuras semanas, cruzando, además, los dedos para que el equipo acabe en la quinta o sexta plaza y no se vea inmerso en las dos rondas previas que se vería obligado a disputar en Europa League.

Muchas incógnitas en el seno del Athletic, a cada cual de más calado, y casi todas esperando a que Valverde mueva la ficha del dominó que provoque las consiguientes reacciones en cadena.

Iribar y Cedrún secundan a Iraizoz, hoy

Gorka Iraizoz no se irá de puntillas. Antes tendrá que recibir el cariño de la gente, como esta tarde, en un acto que espera emotivo para el navarro porque estará arropado por dos de las leyendas más grandes que ha dado la portería rojiblanca, Carmelo Cedrún y José Ángel Iribar. Una foto, desde luego, para enmarcar, como la que le entregará la Peña Indautxu, organizadora del homenaje, y consistente en una imagen de Gorka sacando sobre la misma escuadra una falta sacada por Leo Messi en la ida de la Supercopa en San Mamés. La instantánea captada por el fotógrafo Julio Flor servirá para agredecer al guardameta sus diez años en el equipo. La cita será en la sede la Agrupación Empresial BilbaoCentro, en Particular de Indautxu, a las 19.00. Hace tres años ya premió la trayectoria de Carlos Gurpegi. Será, sin duda, un acto entrañable, con la presencia además de Iribar y Cedrún, y el paulatino adiós de Iraizoz J.V.