Nagore BELASTEGI
BILBO
Elkarrizketa
ALEJANDRO ARQUE
GAME DESIGNER

«Podemos mostrar cosas y hacer reflexionar sobre ciertos temas»

Arque es barcelonés, aunque ahora reside y trabaja en la sede de Londres de la empresa japonesa Square Enix desde hace tres años realizando videojuegos narrativos. En total, suma 13 años en la industria tras pasar por Digital Chocolate y Gameloft.

El videojuego indie “Life is strange” cuenta ya con tres millones de compras y una precuela y una secuela en marcha. Su diseñador, Alejandro Arque, asistió a la Euskal Encounter para hablar sobre los videojuegos con temática social, como es el suyo. Este trata sobre una chica que vuelve a su pueblo natal a hacer un curso de fotografía, donde se da cuenta de que tiene poderes para rebobinar el tiempo. Se trata de una aventura narrativa centrada en la búsqueda de una chica. «El jugador ve los problemas que tienen los adolescentes hoy en día», asegura Arque.

¿Qué temas sugiere que se deben tratar en los videojuegos?

En nuestro juego tratamos la depresión, la eutanasia, el suicidio, embarazos no deseados… no es que hagamos una lista de los temas que queremos tratar, sino que son temas que surgen cuando estamos desarrollando la historia y no queremos censurarlos. Es un valor añadido poder jugar e interactuar con una historia porque puede llegar a concienciar mucho.

Respecto a otros juegos, “Firewatch” explica los efectos mentales del aislamiento, “Papo & yo” es sobre la violencia de género y el alcoholismo, “This war of mine” trata sobre los efectos de una guerra en la población civil, “Night in the woods” sobre la depresión y la muerte de los pueblos.

¿De qué manera se interactúa?

No eres un mero espectador, eres un actor dentro de la historia. Lo que le ocurre a los personajes te puede llegar a pasar a ti. Podemos llegar a mostrar cosas a las que una persona normal no está expuesta, le hace reflexionar sobre ciertos temas.

Pero hay que tener cuidado con cómo se tratan esos temas.

Nosotros hicimos muchas investigaciones sobre el tema, consultamos expertos, hay que enterarse muy bien, no poner lo que uno cree. Si alguien juega a tu juego, que por lo menos vea que lo has tratado bien. Recibimos muchas cartas de fans que se han visto reflejados en personajes y que les había ayudado a sobrellevar ese tipo de situaciones. Mostramos el problema tal cual es, los aspectos negativos y los positivos, y el jugador tiene que decidir qué ocurre en la historia. Al final de nuestro juego tenemos un link a una página web que te pone en contacto con asociaciones de ayuda si te sientes mal o si conoces a alguien con síntomas parecidos.

¿Quizá la gente ya está harta de tantos juegos de acción?

Es como en el cine, tiene que haber de todo; tiene que haber la película palomitera de Marvel y tiene que haber “Moonlight”. Los jugadores ahora somos muchos. Los que antes éramos niños ahora somos padres y queremos otro tipo de juegos. Hemos alcanzado una madurez. La industria donde se ofrezca solo el mata-mata o Fifa no sirve. Esos juegos son como ir a verse la última de “The fast & the furious”, que están bien, pero realmente tenemos muchos juegos de ese estilo.

Se dice que los videojuegos violentos fomentan la violencia.

Así como las películas tienen una calificación por edad, mucha gente compra juegos a niños sin mirar a qué edad está destinado. Nunca le pondrías la película “Platoon” a tu hijo de 5 años. Hay juegos para diferentes edades y hay que investigar un poco antes de comprarlos. Para mi no hay relación entre la violencia en el mundo real y la violencia en un juego.

¿Porque no se trata bien?

Sí, puede ser, por eso tenemos que luchar como industria para que se traten mejor y de forma más realista. “Spec Ops: the line” es un juego de disparar, pero a mitad del juego te enseñan los efectos secundarios de los soldados en una guerra. Tu has estado matando durante el juego, y llega un momento en el que te pregunta si está bien lo que has hecho.

¿Por qué comenzó a hacer juegos con temática social?

Recibí el guión y me gustó mucho porque algunos temas que se trataban personalmente me afectaban, así que pensé que se pueden tratar ese tipo de temas si se tratan de manera correcta. Desde siempre me han gustado los juegos con temas más realistas, y al crecer quiero juegos adaptados a mi manera de ver la vida. Como quiero juegos así, y no los hay, pues los hago yo.