Ainara LERTXUNDI

Culmina el desarme de las FARC y mantienen sus siglas como partido

Las FARC dejaron ayer de ser una organización armada con la salida de los últimos contenedores con armas que quedaban en las Zonas Veredales y anunciaron que su nuevo partido se llamará Fuerza Alternativa Revolucionaria de Colombia. Este simbólico acto contó con la presencia de Santos y del Secretariado.

Sobre las 10.30 –siete horas más en Euskal Herria– salió el último contenedor con armas de las FARC de la Zona Veredal Transitoria de Normalización de Pondores, en el municipio de Fonseca, en el departamento de La Guajira. El presidente, Juan Manuel Santos, junto al saliente Alto Comisionado para la Paz, Sergio Jaramillo, y su sucesor en el cargo, Rodrigo Rivera, y al general Javier Flórez, jefe del Comando de Transición, fue testigo de este «histórico momento» en representación del Gobierno. A escasos metros, Iván Márquez y Pastor Alape, miembros del Secretariado de la guerrilla, también certificaron el fin del desarme que arrancó en enero.

Fue una ceremonia sobria y breve. El jefe de la misión de la ONU en el país, Jean Arnault, hizo hincapié en la complejidad del desarme –en total han registrado y almacenado 8.112 armas, han localizado 873 zulos y extraído el armamento de 510, e incinerado casi 1,3 millones de cartuchos– y de la extracción de los contenedores. Procesos para los que los observadores de la ONU han tenido que realizar 16 operativos aéreos, 10 terrestres y más de 50 vuelos, recorriendo cerca de 10.000 kilómetros de la geografía colombiana.

Arnault agradeció a las FARC su disposición y colaboración a la hora de ubicar los zulos o caletas. «Estamos ante un proceso de dejación de armas exhaustivo que encarrila a Colombia hacia una nueva etapa», resaltó. Con el evento simbólico de ayer se pone fin al cese al fuego y de hostilidades bilateral y definitivo, así como a las Zonas y Puntos Veredales Transitorios de Normalización, que se convertirán en Zonas de Capacitación y de Reincorporación. A partir de ahora arrancará la segunda misión de la ONU que consistirá en verificar la reincorporación a la vida civil de los exguerrilleros y, sobre todo, su integridad física.

Iván Márquez recordó a los dos milicianos muertos en las últimas horas y exigió a Santos que no haya «más asesinatos políticos, ni más destrucción de alternativas políticas como ocurrió con la Unión Patriótica».

«Creemos en su palabra. Que la implementación de los acuerdos no quede inconclusa como las zonas veredales. Nosotros le hemos cumplido al país y le seguiremos cumpliendo cuando seamos gobierno», subrayó.

Anunció que el nuevo partido se llamará Fuerza Alternativa Revolucionaria de Colombia, manteniendo las siglas de las FARC. «Estaremos dentro del sistema pero también seremos antisistema. No queremos romper los vínculos con nuestro pasado, hemos sido y seremos una organización revolucionaria. Seremos la voz de los excluidos».

Santos, quien fue el encargado de colocar el candado al contenedor de la ONU antes de su salida, se comprometió ante los representantes del Secretariado a garantizar la seguridad de los exguerrilleros y a investigar los homicidios de excombatientes y allegados de estos. «Soy el más interesado en que lo de la Unión Patriótica no se repita ni en un porcentaje mínimo. Para eso hemos hecho la paz y trabajaremos con las FARC para garantizar la seguridad», afirmó.

Hizo a todos los colombianos un llamamiento a la reconciliación y «a dejar de vernos como enemigos». «El esfuerzo ha sido titánico y hoy estamos asistiendo al último suspiro de un conflicto de más de cinco décadas y al inicio de una nueva fase para Colombia. Lo imposible ha sido posible. En Irlanda del Norte, el desarme les llevó diez años, aquí ocho meses», exclamó.

Denuncian la muerte de dos milicianos

Las FARC-EP denunciaron la muerte de dos personas vinculadas con la guerrilla en 24 horas, a un día de completarse la salida de los contenedores con las armas registradas de las Zonas y Puntos Veredales.

La Zona Veredal Transitoria de Normalización El Negro Eliecer Gaitán informó que el domingo por la noche en el municipio de Tarra, en el departamento de Norte Santander, hombres armados dispararon contra Norvey Téllez, miliciano de las FARC y hermano de un guerrillero integrante del Mecanismo de Verificación y Monitoreo. En Ituango, Atioquia, mataron a la jefe de las milicias de la zona, Jesús Adán Mazo, después de que participase en la ceremonia de extracción del último contenedor con armas en la Zona Veredal de Ituango.

«Es necesario que el Estado tome cartas urgente en el asunto y no se vuelvan a repetir las oscuras páginas de nuestra historia reciente», exigió el comandante en jefe de las FARC, Timochenko. «Es inaceptable que continúen asesinatos de integrantes de las FARC. Para la reincorporación, las garantías deben darse de inmediato», remarcó Pablo Catatumbo. Ricardo Téllez subrayó que «no se trata de hechos aislados –como sostiene el Gobierno–. Son hechos sistemáticos y bien organizados». Reclamó a Santos «garantías de seguridad».GARA