OLAIZOLA-IMAZ 14

IRRIBARRIA-ZABALETA 22

La bahía zarauztarra acoge esta tarde una de las regatas más especiales del año, una prueba en la que, viendo los últimos precedentes, coger la buena ola se antoja indispensable vista la igualdad entre los botes más po- tentes. En los últimos años, Aimar Olaizola se había movido cerca del agradecido frontis del Aritzbatalde como los patrones más hábiles y, conocedor de todos sus secretos, siempre había logrado la mejor colocación para que su gancho de zurda hiciera crujir los riñones de sus rivales en las tablas del frontón de la localidad costera. Ayer, sin embargo, con un juego no demasiado vistoso, pero eficaz a más no poder y con todo el poder, Irribarria-Zabaleta lograron que el de Goizueta tuviera que remar todo el partido contra corriente y se quedara sin poder aspirar a su decimoprimera victoria en este torneo que había ganado en sus cuatro últimas ediciones.

La cátedra confiaba plenamente en el delantero de Asegarce, qué decir cuando, gracias a un gancho de los suyos, dos saques consecutivos y un error de Irribarria le permitió adelantarse 4-0 junto a un Imaz que se defendía con solvencia, soltando de vez en cuando algún buen derechazo que otro.

Es más, incluso cuando los azules se adelantaron por primera vez en el marcador en el 5-6, e incluso 5-7, los corredores seguían cantando colorado, ya que confiaban plenamente en el idilio del goizuetarra con el Aritzbatalde que, no obstante, ya comenzaba a mostrar sus primeras señales de crisis.

Porque el primer empate (4-4) había llegado con un solo tanto conseguido por los de Aspe y tres errores de Olaizola II. Pero lo que fundamentalmente cambió el signo del partido fue que José Javier Zabaleta, baja en los últimos compromisos por mal de manos, comenzó a disipar las dudas con las que había llegado a Zarautz y los azules pudieron poner en práctica la idea que habían traído macerada de casa.

Castigo a Ander Imaz

No tuvieron que estrujarse los sesos en busca de una fórmula milagrosa, sino que fue suficiente hacer un uso razonable de la potencia de dos de los mayores pegadores del cuadro.

Así lo hicieron y el partido se convirtió en un martirio para un Ander Imaz que no se puede decir que estuvo mal, pero que poco más pudo hacer con los pies todo el rato detrás del ocho, dónde y en el Aritzbatalde. Así las cosas, Aimar se vio sobrepasado e Irribarria no tuvo que cruzar en exceso sus ganchos para sumar tantos.

Con todo, tuvieron su reacción los de Asegarce para adelantarse 13-12 tras ir 6-12, pero la ola buena estaba ya muy lejos.

Zabaleta, feliz por partida doble

Tras 14 días apartado de las programaciones por problemas, jugó su último partido el día 4 en Bera. José Javier Zabaleta terminó doblemente satisfecho tras conseguir el pase a la final del torneo de Zarautz. El de Etxarren reconoció que saltó con algunas dudas a la cancha, incertidumbres que fue disipando a poco de comenzar el partido.

«Parece que he recuperado muy bien, he acabado sin ningún problema y estoy muy contento, pero más que por la victoria o por habernos metido en la final, porque he terminado sin ninguna molestia», señaló el zaguero.

«La verdad es que llevo un mes de julio nada bueno, en agosto con mal de manos y a ver si de aquí a finales de setiembre podemos enderezar el rumbo y, por lo menos hacer buen juego y conseguir victorias».

De cara a mañana, espera una final muy complicada pero espera poder repetir la buena imagen de ayer. J.O.