Maite UBIRIA BEAUMONT
BAIONA

La vuelta al colegio sale más cara a las familias con hijos que optan por la enseñanza profesional

Estos días los comercios de Ipar Euskal Herria experimentan una inusitada actividad, con constantes idas y venidas de padres y chavales que, con una larga lista en la mano, llenan los carros de materiales. Todo debe estar listo para la vuelta a las aulas, fijada a partir del 4 de setiembre. La encuesta publicada por la confederación sindical CSF aporta unas cifras orientativas sobre el desembolso que realizarán las familias a las puertas del nuevo curso escolar.

El retorno a las aulas para los estudiantes vascos está cada vez más cercano. El curso arrancará oficialmente el 4 de setiembre en Nafarroa Beherea, Lapurdi y Zuberoa.

Como cada año por estas fechas, la Confederación Sindical de Familias (CSF) ha dado a conocer esta semana los resultados de la encuesta que realiza a escala hexagonal a partir de la cual hace pública su estimación del costo que el inicio del nuevo curso implicará para las familias.

La encuesta realizada entre 200 familias del conjunto del Estado francés aporta unas cifras orientativas sobre un desembolso que, también en Ipar Euskal Herria, muchos padres y madres han comenzado ya a realizar dada la cercanía de la vuelta a las aulas.

De acuerdo a ese estudio, las familias estiman que gastarán entre 150 y 700 euros en función de la edad y nivel de escolarización de sus hijos.

De este modo, los progenitores con una hija o hijo en primaria (CP) cuentan invertir entre materiales y vestimenta unos 150 euros. La cantidad se eleva a 200 euros en el caso de alumnos de enseñanza básica (CM1), a 350 en enseñanza media (colegio) y a 400 en bachiller general (liceo).

Con todo, el desembolso más importante, estimado en 700 euros, lo deberán hacer los hogares en los que el hijo o la hija opte por el bachiller en rama profesional. Ya que es precisamente la enseñanza preuniversitaria en una sección profesional o tecnológica la que experimentará este año una mayor subida.

Lo que explica ese fuerte desembolso es la carestía de los materiales específicos –calculadoras científicas y otros– que debe adquirir el alumnado en esas secciones educativas.

Reutilizar materiales

De acuerdo a la Confederación Sindical de Familias, el presupuesto destinado a afrontar la vuelta a las aulas se mantendrá o incluso se reducirá levemente en los niveles educativos inferiores. Sin embargo, según aclara esta asociación, tal contención de gasto no se debe tanto a una bajada del precio de los materiales como a la intención que expresan cada vez más familias de utilizar una parte de las adquisiciones del curso precedente –caso de mochilas, estuches y algunos equipajes deportivos– a fin de arañar todo lo posible al presupuesto inicial.

Un segundo estudio ha visto la luz estos días, elaborado por la asociación Familias de Francia, que se basa para hacer su estimación en los precios que tienen los materiales en las cadenas comerciales más importantes. De acuerdo a esta segunda encuesta, las unidades familiares con hijos que cursan enseñanza media (colegio) gastarán 191,73 euros por cada hijo, lo que implica una subida de 0,70% respecto al curso escolar 2016-2017.

Otros desembolsos

El baile de cifras obedece al número y tipo de gastos que se incluyen en la medición. Algunos estudios contabilizan materiales básicos, otros incluyen gastos añadidos a la larga lista que aportan los centros escolares.

De hecho, además de los gastos de materiales y vestuario en este arranque de curso hay que contar con una partida suplementaria, destinada a tarjeta de transporte y a comedor escolar, cuyo montante varía dependiendo del lugar de residencia y del centro escolar. Ello se explica en parte porque las aportaciones de entidades locales y supramunicipales son diferentes.

A esos gastos hay que sumar los destinados a cubrir licencias deportivas, seguro de accidente escolar y actividades extraescolares, que harán que la factura final supere la estimación aportada por las diversas asociaciones de familias.

Una prestación pública para compensar los múltiples gastos

Los datos de la encuesta CSF se daban a conocer la misma semana en que la CAF, entidad pública francesa de apoyo a las familias, comenzaba a pagar la denominada ARS, prestación a la que tienen derecho 2,8 millones de familias con ingresos modestos para afrontar los gastos que implica el arranque del curso escolar.

Esa prestación se eleva este año a 364,09 euros en el caso de tener hijos con edades comprendidas entre los 6 y 10 años, a 384,17 para los chavales entre 11 y 14 años de edad y a 397,49 para alumnos de 15 a 18 años, según la comunicación hecha pública por el Gobierno francés.

Pueden aspirar a percibir esta prestación pública todas aquellas unidades familiares que tienen hijos escolarizados, en edades comprendidas entre los 6 y los 18 años, y cuyos ingresos anuales son inferiores a 24.404 euros en el caso de tener un solo hijo, de 30.036 euros en el caso de familias con dos hijos y de 35.668 euros cuando son tres los menores que integran la unidad familiar. A partir de tres hijos hay que sumar 5.632 euros a la renta para calcular el aporte de la ayuda por descendiente que reciben las familias en el Estado francés al inicio del nuevo curso escolar.

Los padres y madres de chavales con edades comprendidas entre los 6 y los 15 años de edad no deben cumplir ningún tramite para recibir la ayuda, ya que ésta es abonada automáticamente previa comprobación de los baremos de ingresos de la persona o personas responsables de los menores.

Como novedad, este año las familias con hijos adolescentes (entre 16 y 18 años de edad) tampoco deberán aportar como hasta ahora el certificado de escolarización, sino que bastará con que confirmen la escolarización vía página web de la CAF. En el caso de aquellos progenitores cuyos hijos tengan cinco años al arranque de curso y cumplan los seis el año próximo, deberán solicitar el certificado de escolarización al centro escolar y remitirlo a la CAF, que les ingresará la ayuda correspondiente. M.U.