Ramón SOLA
DONOSTIA

Seis denuncias de maltrato policial sobre un total de 117 en el Estado

El informe presentado esta semana por la Coordinadora estatal para la Prevención y la Denuncia de la Tortura sobre 2016 muy poco tiene que ver con los de hace algunos años por lo que atañe a Euskal Herria. Se recogen seis situaciones denunciadas, que afectan a doce personas, mientras en el total estatal son 117 casos y 259 víctimas. Destaca el fallecimiento del senegalés Elhajdi Ndiaye en la comisaría de Iruñea tras un arresto que se ha acreditado violento.

Un año más, la Coordinadora estatal para la Prevención y la Denuncia de la Tortura ha recopilado en un informe todas las denuncias (judiciales o no) de torturas y maltratos policiales de las que ha tenido constancia, en este caso en 2016. Y, muy al contrario de lo que ocurría hasta inicios de esta década, Euskal Herria no ocupa un lugar relevante en volumen de casos, sino equiparable al resto: se refieren seis, que vienen a ser los mismos que Baleares, uno más que Aragón y tres menos que Galicia, y que quedan lejos de los 18 de Andalucía, los 24 de Catalunya o los 25 de Madrid (que tienen una población considerablemente mayor).

Se trata de situaciones variadas en las que la Coordinadora entiende que se ha producido algún tipo de actuación violenta policial. Es así como se recogen textualmente en el informe, por orden cronológico:

1) «19 de junio, Donostia: Un periodista que se encontraba cubriendo la movilización de Gipuzkoa Zutik fue agredido por un ertzaina. El policía trató de quitarle el teléfono móvil informando el afectado en ese momento de que era periodista. El agente hizo caso omiso y le tiró al suelo rompiéndole los pantalones y el jersey».

2) «24 de junio, Iruñea. Cinco hombres fueron agredidos por miembros del Cuerpo Nacional de Policía (CNP). Se celebraba en la localidad una kalejira festiva por los actos del Gazte Eguna (...) La Policía comenzó a cargar, pese a haber sido informada por la Administración de que estaba autorizada. Dos de las personas lesionadas eran menores de edad y uno de ellos presentaba perforación en el tímpano».

3) «10 de agosto, Gasteiz: En fiestas de la Virgen Blanca, un menor migrante se encontraba con sus amigos en la calle de madrugada. Cuando la Policía Local se personó, por la existencia de otro altercado, los jóvenes empezaron a correr. El agredido se escondió debajo de una furgoneta, de donde le sacaron gritándole ‘cállate, puto negro’. Presenta lesiones en la boca, donde señala que le insertaron un objeto no identificado. Cuando comprobaron su documentación y se percataron de que era menor de edad, le dejaron marchar».

4) «25 de octubre, Iruñea: Agentes de Policía Nacional dan cuenta de la muerte en los calabozos de su comisaría en Iruñea de una persona detenida, E.N. En un primer comunicado, señalan que le encontraron en el calabozo sin respirar y que, tras haberle practicado maniobras reanimatorias, le dieron por muerto. Posteriormente, varios medios publicaron un video en el que se observa cómo es golpeado con un puñetazo por uno de los agentes, que le reducen en el suelo durante su detención, mientras que varios testigos señalan que iba inconsciente cuando fue trasladado por la Policía».

5) «28 de octubre, Sestao: Agentes de la Ertzaintza informan de la muerte de un varón de 22 años en sus dependencias. En un comunicado, señalan que a media tarde del día 27 desde el Hospital de Cruces requirieron la presencia de una patrulla de la Ertzaintza porque un paciente del área de Psiquiatría había sido de alta pero ‘se negaba a abandonar el centro sanitario y estaba distorsionado su funcionamiento’. Al identificarle, los ertzainas comprobaron que existía sobre él una requisitoria judicial, por lo que procedieron a su detención y traslado a dependencias policiales. ‘Durante la práctica de la diligencia de lectura y ejercicio de derechos’, el joven detenido solicitó asistencia médica por lo que, hacia las 20.30, fue trasladado de nuevo al Hospital de Cruces, donde fue atendido en el servicio de urgencias. Tras ser dado de alta nuevamente, fue trasladado a la comisaría de la Ertzaintza para completar las diligencias. Pocas horas después un agente lo encontró muerto en calabozos».

6) «5 de noviembre, Iruñea: Tras la celebración de un partido de fútbol, varios hinchas del Deportivo Alavés fueron golpeados con porras por miembros del CNP durante el desalojo del estadio de El Sadar. En el vídeo puede apreciarse cómo al menos tres hombres son golpeados con porras por varios agentes, cuando estaban bajando unas escaleras sin oponer resistencia ni tener ninguna actitud hostil hacia los agentes».