REAL SOCIEDAD 2

VALENCIA CLUB FÚTBOL 3

Marcelino sufrió un tirón mientras celebraba el gol de Zaza con el que el Valencia ganaba en Anoeta y permitía al técnico asturiano mejorar su estadística con la Real, contra la que ha logrado nueve victorias y dos empates en once encuentros.

Los técnicos fueron los protagonistas del encuentro porque si Marcelino es la clave de este nuevo Valencia como Eusebio lo es de esta gran Real, pero el entrenador vallisoletano no estuvo acertado con los dos últimos cambios con los que respondió a las expulsiones de Zubeldia y Kondogbia. Tras la del azkoitiarra dio entrada a Canales, que no está para jugar once contra once, pero menos puede salir al campo con el equipo en inferioridad numérica, cuando defensivamente es flojo y con diez contra once toca siempre defender más. Y menos cuando están en el césped Januzaj, que defiende menos que poco, y un Oyarzabal reventado al jugar 90 minutos cuando el miércoles no pudo ni acabar el entrenamiento. Además quitó a Willian José...

Tampoco enmendó ese error Eusebio cuando, tras la expulsión de Kondogbia, en lugar de sacar a uno de los dos delanteros centros que tenía en el banquillo, retiró a Xabi Prieto, que es uno de los que da equilibrio al equipo, y dio entrada a Pardo por vez primera esta temporada. Así al Valencia en ese duelo de diez contra diez le bastó un pase de un central para romper toda la defensa realista en el 2-3 marcado por Zaza y luego no tenía ninguna referencia válida en el área para buscar el empate.

Una defensa bisoña

Porque esos cambios además llegaban en un partido en el que Eusebio tuvo que improvisar una defensa por las bajas de tres de los cuatro centrales de la primera plantilla con cuatro canteranos que no superaban los 23 años. Esa bisoñez se notó en la jugada del primer gol valencianista, en la que de un saque de banda mal defendido el Valencia montó un contragolpe que culminó Rodrigo a placer.

El equipo realista presentaba ocho jugadores formados en Zubieta junto a Rulli, Willian José y Juanmi, con cinco cambios con respecto al once que perdió el jueves en el Ciutat de Valencia, los mismos que introdujo Marcelino a pesar de tener dos días más de descanso. Eso sí, mantuvo a los cuatro jugadores del centro del campo y a Zaza.

Con ese once, el Valencia demostró que es otro con la llegada de Marcelino al banquillo, con un equipo que defiende muy bien y que cuando recupera el balón sale al contragolpe con mucha velocidad y verticalidad. El conjunto valenciano se impuso en la primera parte, aunque sin crear ocasiones claras, y la Real fue de menos a más y Willian José tuvo un par de opciones antes de que Aritz Elustondo lograra el empate.

En el segundo tiempo Eusebio colocó a Januzaj en el campo en sustitución de Juanmi y, tras unos primeros minutos en la izquierda, pasó a la derecha y Oyarzabal volvió a la banda en la que se encuentra más cómodo, aunque defendió muy mal a Nacho Vidal por fuera y le permitió ganarle la posición en el 1-2 y superar a Rulli con una vaselina en su salida desesperada.

Oyarzabal compensó su error al lograr el empate con un potente disparo desde la frontal del área que entró pegado al poste de Jaume Domenech y ese gol levantó a su equipo y al público, pero Jaime Latre castigó con mucho severidad a Zubeldia con dos amarillas mientras que a Kondogbia le perdonó por dos veces su expulsión antes de que se ganara la roja a pulso. Y en el duelo de diez contra diez la Real volvió a demostrar su debilidad defensiva y Marcelino pudo celebrar otra victoria en Anoeta.

Insignia realista para Azkoaga, Encinas y Zelaia

El presidente de la Real Sociedad Jokin Aperribay entregó ayer antes del inicio del encuentro la insignia de oro y brillantes de la entidad a la que fuera jugadora de la sección de hockey hierba Maite Azkoaga y a las del equipo femenino de fútbol Aintzane Encinas y Maialen Zelaia, como reconocimiento a sus dilatadas trayectorias en el club blanquiazul. Realizaron además el saque de honor.

El juvenil se dejó empatar por el Alavés al final

El Alavés empató ayer (2-2) en Zubieta a la Real juvenil en el minuto 93. El sábado el Sanse perdió con el Burgos (0-1) y el infantil con el Ostadar cadete (0-1). La Real C ganó al Deusto (1-2), el cadete al Kostkas (4-1) y el cadete txiki al Bergara (2-3). El Easo empató con el Antiguoko (0-0).