Joseba ITURRIA
REAL

El ejemplo a seguir en el reto de lograr un equilibrio

La Real recibió cuatro goles en las ocho victorias, seis sin encajar un gol, y un empate de los once últimos partidos de la primera vuelta la pasada campaña. El derbi de Mendizorrotza rompió la peor racha defensiva.

La Real despidió el sábado en Mendizorrotza su segundo partido de Liga sin encajar gol tras recibir dieciséis en los cinco oficiales anteriores. Recuperó un equilibrio defensivo cuya eficacia ya se demostró en los últimos once partidos de la primera vuelta de la pasada temporada, cuando Rulli acabó seis imbatido en una serie de ocho victorias, un empate ante el Barcelona en el que se mereció ganar y dos únicas derrotas en Riazor y ante el Sevilla tras alinear el mejor equipo días antes en la Copa.

El año pasado la Real consiguió ganar diez de los 38 partidos de Liga sin encajar un gol, ante Osasuna (0-2), Betis (1-0), Alavés (3-0), Leganés (0-2), Atlético (2-0), Granada (0-2), Málaga (0-2), Celta (1-0), Las Palmas (0-1) y Deportivo (1-0). Seis de ellos fueron en las once últimas jornadas de la primera vuelta.

Esta temporada ha conseguido ganar sin encajar gol dos de los ocho partidos de Liga ante Villarreal (3-0) y Alavés (0-2), a los que sumar el de la Europa League contra el Rosenborg (4-0). La diferencia está en que el año pasado en doce partidos de Liga y cinco de los seis de Copa la Real recibió un gol, mientras que esta temporada en los siete partidos oficiales en los que ha encajado ha recibido al menos dos, para un total de veinte.

Por eso la Real tiene una referencia a seguir, en unas once últimas jornadas de la primera vuelta de la pasada temporada en las que su juego no fue especialmente espectacular, pero sí muy efectivo. Y eso que Eusebio necesitó tiempo para dar con su once de gala y encajar su estilo de juego y en los primeros seis partidos de Liga la Real solo despidió sin encajar un gol el derbi de El Sadar ante Osasuna.

A partir de la séptima jornada encadenó tres seguidos en Anoeta sin recibir ninguno y encontró el equilibrio que ahora busca Eusebio con una gran posesión de balón y un control del juego en el campo contrario, lo que reduce las opciones de crear ocasiones al rival, pero sin asumir tampoco grandes riesgos en ataque. La Real no era entonces un equipo espectacular como en este comienzo de temporada en el que es el segundo máximo goleador con 19 goles, solo superado por el Barcelona.

Desde la novena jornada

La temporada pasada solo llevaba once goles a favor, doce en contra y diez puntos en los ocho primeros partidos, tres menos que ahora. A partir de ahí empezó a dar su mejor nivel con una racha de ocho victorias, un empate –nueve partidos en los que encajó cuatro goles– y dos derrotas en las que recibió nueve tantos en Riazor (5-1) y ante el Sevilla (0-4) tras jugar Copa entre semana con el mejor equipo.

Ahí está el ejemplo a seguir, en los partidos en los que el equipo ha sido capaz de ser efectivo sin encajar goles, y el aspecto a corregir, porque los goles llegan cuando los jugadores básicos acumulan esfuerzos, lo mismo que ha sucedido en el primer bloque de encuentros seguidos de esta temporada.

El segundo que se inició el sábado es más asequible que el anterior porque el Vardar macedonio en la Europa League y el Lleida en la Copa son rivales a los que la Real está capacitada para ganar con las rotaciones necesarias para que el equipo no acuse jugar otro encuentro entre semana. Porque es con el cansancio cuando llegan más errores y desajustes defensivos.

Rulli: «Supimos corregir los errores»

Gerónimo Rulli se mostró satisfecho por despedir el derbi de Gasteiz sin encajar gol y por «una victoria que necesitábamos. Estuvimos muy bien defensivamente. Lo importante era romper esta dinámica de cuatro derrotas consecutivas y un empate en las que encajamos muchos goles. Fue un mes duro para todos con muchos errores, los supimos corregir, el míster los agarró a tiempo. Tuvimos estas dos semanas que nos vinieron bien para corregir lo que se debía porque no se podía seguir así. Nos puso los vídeos para corregir los errores. Analizamos en qué nos equivocamos y ha acertado. Lo agarramos a tiempo y es preferible que lo trabajemos ahora y no con la temporada finalizando, que te juegas muchas cosas. Mejor hacerlo a principio de temporada».

El portero argentino destacaba que si el equipo mantiene su portería a cero «es cuestión de tiempo que los de arriba saquen algo de la chistera. Tenemos un poder ofensivo muy bueno, que nos da mucho a nosotros. Si mantenemos el equilibrio en la defensa vamos a ser un equipo muy difícil de ganar».

Rulli destacó el trabajo realizado por Aritz Elustondo. Dijo que «es un jugador muy importante. Todos lo queremos muchísimo. Tuvo un año pasado difícil con problemas familiares que afectaron a todos y al que más a él. Estoy feliz por Aritz por el trabajo que hizo durante la pretemporada, en la que fue el mejor, y en este comienzo de temporada la confianza que le ha dado el míster ha sido mucha y él se la ha devuelto en la cancha». J.I.

Siete triunfos y un empate de la cantera en el fin de semana

La Real C ganó ayer al Bermeo (1-0) en Zubieta y es cuarto en la clasificación a un punto del líder Santurtzi y el primer juvenil derrotó al Antiguoko (1-0). Estas dos victorias completaron un buen fin de semana porque el sábado el Sanse ganó 0-3 al Osasuna Promesas, el cadete al Tolosa (2-1), el cadete txiki al Anaitasuna (9-0), el infantil al Danena B cadete (1-9) y el infantil txiki al infantil del Danena (0-2). Solo el Easo empató en Barakaldo (1-1).

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