Beñat ZALDUA

Guía para un lunes que lo puede precipitar todo (o no)

Puede no ocurrir nada, o puede ocurrir de todo. Este arranque de semana viene plagado de citas que pueden mantener el impasse de los últimos días o precipitar los acontecimientos que acaben decantando todo para un lado u otro. Por pasos.

Primera cita. A las 10.00 acaba el plazo que el Gobierno español le dio al president de la Generalitat, Carles Puigdemont, para responder si el pasado martes declaró la independencia o no. Cualquier cosa que no sea una simple respuesta negativa activará el siguiente plazo, que finaliza el jueves 19. Si antes Puigdemont no se retracta, Rajoy dará el siguiente paso para aplicar el 155, que es detallar ante el Senado las medidas propuestas para restablecer el orden constitucional.

En clave política, Puigdemont confía en que la respuesta –que trata de consensuar con los agentes soberanistas– sirva para calmar las aguas y recuperar la unidad de acción independentista, tocada después de que cambiase el guión del pleno del pasado martes de forma unilateral, tan solo una hora antes de pronunciar su discurso. No cabe esperar una respuesta directamente afirmativa, pero tampoco negativa. Habrá que leer la letra pequeña de una misiva que también mirará a los actores internacionales.

Segunda cita. En el momento en que se acabe el plazo de Puigdemont, los presidentes de la ANC y de Òmnium Cultural, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart, respectivamente, así como el mayor de los Mossos d'Esquadra, Josep Lluís Trapero, estarán declarando en la Audiencia Nacional española, acusados del delito de sedición. Es fácil pensar que el Estado se guarda la baza de hacerse con los primeros rehenes catalanes en función de la respuesta de Puigdemont a Rajoy. Dentro de la perversa lógica judicial española, no tienen difícil justificarlo. Es evidente, igualmente, que si la jueza Lamela decide mandar preventivamente a la cárcel a alguno de los citados a declarar, todo cambiará (y se acelerará) en Catalunya. Ver venir.

Tercera cita. A las 16.00 está programada una Junta de Portavoces del Parlament, en la que se prevé que la CUP proponga la celebración de un pleno monográfico sobre la independencia y el proceso constituyente. Un pleno que culmine, de forma solemne, con la proclamación de la República catalana. En JxSí hay quien compra la idea y quien responde con una mueca. De nuevo, lo que ocurra con las dos citas anteriores será determinante para hacer de la jornada de hoy un punto de inflexión o para, simplemente, dejar que el balón siga corriendo hasta la próxima cita. Sea como sea, que la ansiedad y las prisas no le quiten el sueño a nadie; los hechos se precipitarán, si no es hoy, en los próximos días.