GARA
BILBO

La cumbre europea de salud laboral se centra en el envejecimiento

«Trabajos saludables en cada edad» es una campaña de la UE, iniciada en 2016, orientada a promover la vida laboral sostenible en el contexto de una población activa europea en proceso de envejecimiento y cuya edad media es de 42,2 años. Este programa ha sido implementado por la Agencia Europea para la Seguridad y la Salud Laboral.

En su sede bilbaina, la Agencia Europea para la Seguridad y la Salud en el Trabajo (EU-OSHA) celebra, entre ayer y hoy, una cumbre que gira en torno al enunciado “Trabajos saludables en cada edad”. En este evento toman parte 350 delegados procedentes de todos los estados de la Unión Europea, entre los que figuran responsables políticos, interlocutores sociales, representantes de la Comisión Europea, expertos en seguridad y salud en el trabajo, y otros colaboradores de la agencia.

Tal como indicaron desde la organización, estos agentes «reflexionan sobre los logros alcanzados por la campaña bienal y sobre las lecciones aprendidas, e intercambian buenas prácticas en materia de trabajo sostenible». Entre otros, en la primera jornada tomaron la palabra Károly György, presidente del consejo de dirección de la agencia; Marianne Thyssen, comisaria europea de Empleo, Asuntos Sociales, Capacidades y Movilidad Laboral, que lo hizo con un mensaje de vídeo; Marian Schaapman, jefa de la Unidad de Condiciones de Trabajo del Instituto Sindical Europeo (ETUI); y María Jesús San José, consejera de Trabajo y Justicia del Gobierno de Lakua.

Los datos recogidos durante la campaña constatan que en Europa la población activa se encuentra en proceso de envejecimiento y, al mismo tiempo, la edad oficial de jubilación se está retrasando. No obstante, esto no significa que todas las personas trabajen realmente hasta edades más avanzadas, ya que muchos trabajadores dejan el mercado laboral antes de la fecha oficial de jubilación y, por ende, «en muchos estados de la UE la participación en el empleo de los trabajadores mayores es relativamente baja».

«Para las empresas y organizaciones –se recoge en las conclusiones–, el cambio demográfico que afecta a la población activa plantea numerosos retos, como el hecho de que el 27% de los trabajadores considere que no podrá continuar en su puesto de trabajo actual una vez cumplidos los 60 años».

Incide en los resultados del proyecto “Trabajo más seguro y más saludable a cualquier edad”, realizado a instancias del Parlamento Europeo, que «no vienen sino a reforzar el carácter decisivo de estas cuestiones». Porque, si bien «la fuerza de trabajo está envejeciendo» en todos los Estados europeos, «la magnitud, la velocidad y el tiempo del proceso de envejecimiento varía». Y no solo hay que tener en cuenta las diferencias demográficas, ya que también hay grandes disparidades económicas y de salud entre los países, así como en los sistemas de protección social y las condiciones laborales.

Precisamente, como indicaron los promotores de la cumbre, la jornada de apertura incluyó una mesa redonda sobre políticas y estrategias eficaces orientadas a promover el envejecimiento saludable.

Sustancias peligrosas

Otras sesiones de esta cumbre se dedicarán a las medidas que pueden adoptarse para promover «el trabajo sostenible, las buenas prácticas en materia de rehabilitación y reincorporación al trabajo, y el poder de la comunicación no verbal y el humor a la hora de llegar a una audiencia más amplia».

Una vez concluida esta campaña, inmediatamente se pondrá en marcha la que se ha denominado “Trabajos saludables: alerta frente a sustancias peligrosas”, que se prolongará durante los años 2018 y 2019. En este sentido, desde la agencia subrayan «la importancia de jerarquizar las medidas de control», que responde a un esquema conocido, por sus siglas en inglés, como ‘el principio STOP’: sustitución, controles técnicos, medidas organizativas y equipos de protección individual.