Pablo CABEZA
BLBO
Elkarrizketa
JSANG
VOCAL Y COMPOSICIÓN DE GOVERNORS

«No podría entender la música sin retos hacia espacios desconocidos»

Tras una pequeña pausa regenerativa, la banda de Arrasate Governors regresa con «Z.E.R.O.», posiblemente su disco más completo, sólido y variado. Caen riffs desde más arriba de las estrellas, giran las melodías imposibles entre ritmos inquietos. Brilla la música. Es un buen día.

“Diabulus” abre “Z.E.R.O.” Suenan guitarras saturadas, un riff por la mitad del camino revuelve las tripas. Las melodías imposibles de JSang van iluminando. Son Governors con su carga de thrash y mucho rock. Se habla de la pederastia y abusos de menores por parte de miembros de la iglesia católica, así que no extraña que la distorsión de guitarra parezca un intestino vomitando.

Restan nueve canciones y según el número de escuchas las notas sobre el folio van cambiando por sí solas. Escritura automática para un disco tan melódico como áspero, tan directo como colmado de paisajes. Cruce de thrash y rock, muy presente, y las melodías de JSang, que nunca se agotan, ni siquiera en años de sol.

¿Qué se puede destacar?, ¿el single rockero “Harro”? Sin duda Pero llega “Inor ez” que tras una entradilla con sofás para la escucha, arranca con una de las mejores melodías del disco, más el sencillo, pero admirable, detalle de un riff de guitarra que va a picotazos. Suena “1937” es ruda, violenta, grave com el thrash, ligeros y ensoñadores teclados de fondo. Cambios de ritmo, reentradas y más estribillos infinitos. Todo sobrevuela sobre los pueblos de Euskal Herria que padecieron bombardeos por parte de los fascistas de la Guerra del 36.

El colaborador Koldo Uriarte inicia “Hezurraren kultura” con unas notas de piano sobrecogedoras; piano y voz sin temores para una melodía de JSang muy hermosa. No le gusta que se la califiquen como balada, pero cumple con lo que se entiende por el estilo y su textura. La explosión y los arreglos orquestales elevan el clima hasta las nubes. Un nuevo clima introduce en “Z.E.R.O.” (Baga Biga) “X&Y”, de curioso ritmo; un solo veloz y matizado se desnuda impecable e inspirado. Suenan los ¡ehhh! y muere con orgullo a flechazos lanzados por el “fade out”. Esa guitarra volverá a ondear en “Amets hipoxikoak”. Canción rápida.

Y cierre con la volátil y juguetona “Kontra”. Los sintetizadores de Koldo ayudan a concluir un sobrio y sugerente disco, un dragón de dos cabezas, metal y rock, que lo mismo expulsa fuego que confetis envenedados.

Tras la edición de «Su garaian», grabado en un día de nieve y frío, anunciaron un parón, pero, en realidad, entre el inicio de las composiciones y el presente bien parece un suspiro en el tiempo. ¿Recobrada la energía? ¿La motivación si es que en algún momento falló?

Energía había, pero estábamos trabajando mal. El modelo no era el correcto, nos habíamos vuelto cómodos creando una situación nada positiva para el grupo y eso se acaba convirtiendo en falta de motivación. Necesitábamos volver a colocar unas buenas bases de trabajo y organización antes de volver a encarar un nuevo disco, esa fue la razón del parón de actuaciones en directo estos dos años, pero como comentas, el trabajo de composición no ha dejado de funcionar. Para nosotros sí que ha sido un suspiro, porque no hemos parado de trabajar en los temas y de pensar en cómo reorganizar bien el grupo.

Desde el disco anterior en estudio, «Morphinapolis», sí ha pasado tiempo, son cuatro años. ¿Estas canciones son la gestión de ese periodo de tiempo?

Cuando paramos manejábamos estas fechas como la posible salida del nuevo disco. Personalmente me encanta el proceso de composición, pero en algún momento tienes que decir basta porque puedes estar trabajando y dándole vueltas a los temas indefinidamente, sin lógica. Nos llegamos a juntar con más de 30 ideas de canciones. Había presión en el sentido de que después de un parón algo largo, debíamos volver con un disco a la altura y, en ese sentido, estamos contentos con el resultado.

Tenemos la impresión de que una banda como Volbeat caló en Governors y en su forma vocal tiempo atrás, pero que desde la humildad que supone pelear desde un pequeño país, hay muchos momentos en el que les superan.

Pues si te digo la verdad, no son una referencia para nosotros. Me pasaron su “Rock the rebel/metal the devil” en 2007 y algunas canciones de ese disco me gustaron mucho, pero después no les he seguido más allá de oír algún tema nuevo en las redes. Me gusta su cantante porque tiene personalidad y un vozarrón, pero la música no me acaba de enganchar del todo. Las referencias que tenemos suelen ser mezclas de grupos muy dispares: rock, metal, pop, electrónica, incluso compositores de bandas sonoras.

Con Volbeat o sin Volbeat, la cuestión es que tienen desde el inicio una singular forma de entender el metal/rock. Suponemos que ondear la bandera de lo diferente es motivo de orgullo. Aquí nadie suena como Governors, ni parecido.

A veces es bueno y otras, sobre todo para los puristas de los estilos, parece que no acabas de encajar en ningún lado. A nosotros nos da un poco igual, nos gusta la forma en que trabajamos las canciones, sin ningún tipo de límite o censura previa porque te asocien a algún tipo de estilo concreto. Me encanta el vértigo que produce afrontar un tema desde la perspectiva de decir, “esto no lo hemos hecho nunca, a ver qué sale”. Si es un buen tema, acabará en el disco independientemente de si lo hemos hecho con una flauta y un cencerro, ja ja ja. No podría entender la música sin los retos de dar pasos en esos espacios desconocidos, a veces son pequeños y otras zancadas. Encima las canciones más arriesgadas de cada disco han tenido siempre muy buena acogida entre el público que nos sigue, por lo que creo que ya están acostumbrados a que cada disco pueda traer algo inesperado.

La canción menos Governors del disco y quizá de vuestra carrera es «Hezurraren kultura», ¿costó aceptar un corte de textura lenta, piano y voz a pelo casi hasta el crescendo apoteósico con los arreglos orquestales? ¿No es un riesgo vocal complejo para el directo?

Este es uno de esos retos que comentaba. Se me ocurrió la melodía vocal y le saqué unos acordes al piano. Seguí trabajándola y desarrollándola y se la pasé al grupo prácticamente acabada, pero solo con una base de piano. A todos les gustó mucho tal y como estaba, a pelo, sin más instrumentos, y decidimos dejarla así. Se la pasamos, no obstante, a Koldo Uriarte, quien corrigió algunos acordes, incorporó los arreglos y nos sugirió darle un poco más de fuerza al final, probamos a meter caña en la última parte y nos gustó el resultado. El reto vocal en el directo es importante, pero ¿qué sería la vida sin estos?

Koldo ha realizado una buena labor en muchas partes del disco, desde el piano a los sintes...

Ha hecho un trabajo enorme. Es la segunda vez que trabajamos con él y es una persona con la que te entiendes muy bien a la hora de trabajar. Le explicas el concepto de la canción o el tipo de sonido que buscas para los arreglos que llevamos y da en el clavo. Además pone su sabiduría a disposición del grupo, deja su huella, pero consiguiendo que encaje muy bien con los criterios del grupo. Y eso es algo muy importante cuando trabajas con alguien ajeno a la banda.

Otra canción de ritmo peculiar, es «X&Y», que puede convertirse en otro himno como la anterior o como «Harro». Cuenta con un espléndido solo de guitarra. De otra parte, Aitor Antruejo graba en el disco, pero no será el guitarra de los directos, le sustituye otro Aitor.

Todos los solos del disco y parte de los arreglos en las canciones los han compuesto y grabado Aitor Losada (Ermua, estuvo sustituyendo a Aitor Gorosabel en “Suta” cuando este se lesiono) y Ander Zubillaga (Lezo), que son los nuevos guitarristas del grupo, concretamente el solo que comentas es de Zubillaga. Aitor Antruejo ha participado en la composición de parte de los arreglos del disco como ya hemos hecho otras veces, la razón de contar con Antruejo en este disco o en el anterior, ha sido porque hasta hace unos meses trabajábamos con un guitarra de forma itinerante para los directos y en la composición contábamos con Aitor. Esta es una de las cosas que sabíamos que debíamos cambiar al iniciar el parón. Cuando empezamos a trabajar en este disco todavía no estaban Ander ni Aitor Losada, pero a medida que se incorporaron al grupo fueron trabajando en la composición de algunas partes de las composiciones, con plena integración.

Graba su voz de una manera singular, aunque es un método explicitado desde hace años: una cabina preparada para montarla en casa y plasmar la voz en condiciones óptimas, con su micro particular... Da la impresión de que es una locura, pero funciona.

Siempre he trabajado mucho en casa antes de llevar los temas al local. Me gusta darle muchas vueltas en casa y definirlos bastante, así veo si van funcionando o no los temas, es una criba previa de todo lo que se me va ocurriendo, si no sería una locura. En cuanto a la voz, hace cinco años, me compré una cabina de grabación para colocarla en casa y es la mejor inversión que he hecho nunca. Me permite optimizar mejor mi tiempo, trabajo muy cómodo y cuando tengo un momento de inspiración no tengo que ir hasta el local a grabar las ideas. Si me bloqueo, me despejo un poco por casa y lo retomo luego, muy recomendable. Esta vez grabé todas las voces del disco en casa y me ha encantado el resultado. He probado cosas hasta que me he quedado a gusto, sin estar pendiente de si se retrasaban los días de estudio, etc. Grababa dos canciones un día, descansaba tres, grababa otras dos, volvía a regrabar la primera porque se me había ocurrido otra cosa.

Cuenta de nuevo con la producción de Jimmy Soziedad Alkoholika, perdura la confianza y la validez del método.

Tengo mucha relación con Jimmy desde hace casi 20 años. Entonces ya colaboró en la producción de algunos discos de Ekon. Ha estado presente en partes de la producción de otros discos de Governors. Es una persona que se implica mucho y ha sido de gran ayuda. Había temas muy metaleros y otros que iban más por una senda más rockera y queríamos que cada canción tuviera su propio carácter, queríamos jugar con las afinaciones y distintos sonidos de guitarra para cada tema y que el sonido fuera más duro en los títulos más cañeros, y para todo eso contamos con él. Siempre está muy actualizado, nos ha ayudado a definir mejor algunas guitarras y a darle un carácter más agresivo al disco.