El copresidente del partido de izquierdas y prokurdo Partido Democrático de los Pueblos (HDP), Selahattin Demirtas, compareció ayer por primera vez ante un tribunal, 399 días después de su encarcelamiento.

El caso que juzga al líder del tercer partido en Turquía ha ido demorándose a través de maniobras jurídicas que lo han intentado mezclar con otros casos y cambiándolo de tribunal en varias ocasiones.

Ayer se impidió la presencia física de Demirtas ante el tribunal. El copresidente del HDP no estuvo presente en la audiencia de ayer ya que se le pidió que asistiera a través del sistema de videoconferencia, al cual se negó, diciendo que quería ser juzgado cara a cara, según la agencia Firat. Así, no se la permitió trasladarse desde la cárcel de Edirne, a 700 kilómetros de distancia, en la que está detenido

Tampoco fue autorizada a asistir al juicio una delegación extranjera compuesta por diputados y sindicalistas de numerosos partidos de Reino Unido, Irlanda, Francia, Italia, Grecia, Suecia, Noruega, Dinamarca y Alemania. El tribunal decidió continuar el encarcelamiento de Demirtas, como pidió el fiscal durante la audiencia celebrada en la sala del Recinto Penitenciario de Sincans. Además, fijó la próxima audiencia para el 14 de febrero de 2018.

Demirtas fue detenido junto a otros diputados del HDP el 4 de noviembre de 2016, cuando el Gobierno turco extendió al movimiento kurdo la represión que puso en marcha tras el intento de golpe de Estado. Actualmente, siguen encarcelados siete diputados, entre ellos la copresidenta del HDP Figen Yúksekdag. Además, han sido detenidos más de 5.000 militantes.

La acusación de dirigir una «organización terrorista», «propaganda terrorista» e «incitación a cometer crímenes» puede acarrearle hasta 142 años de prisión.

Defensa obstaculizada

Los abogados del político subrayaron el carácter legal de sus actividades ya que las acusaciones se basan en sus discursos, conferencias y ruedas de prensa vinculadas a su actividad política, por lo que exigieron el abandono del proceso y su puesto en libertad.

El líder del HDP envió una petición al tribunal para demandar las condiciones necesarias para que pueda defenderse.

El HDP denunció que el Ministerio turco de Justicia ha apelado a los tribunales en los que se juzgan casos contra Demirtas –más de un centenar– que no le permitan presentarse físicamente ante ellos.

Además, señaló que individuos no identificados asaltaron la oficina de uno de los abogados y robaron el ordenador que contenía la defensa preparada para la vista de ayer.