Gracias a que el estudio Sony Pictures Animation ha respaldado esta modesta película animada, ha conseguido una importante rentabilidad en la taquilla de los EEUU, doblando en recaudación la cantidad invertida de 18 millones de dólares. El proyecto pertenece en origen a la productora Affirm Films, dependiente del lobby cristiano que provee a Hollywood de películas tan baratas como piadosas. Si una major ha creido en “The Star” es porque la idea argumental le parecía original y propicia para funcionar en la cartelera navideña en competencia con otras producciones más caras, pero ya más vistas.

“The Star” relega a los personajes humanos del Nuevo Testamento a meros secundarios, cediento todo el protagonismo a los animales que fueron a adorar al niño dios recién nacido, y, como no, poniéndoles voz. Y si la película no puede disimular sus limitaciones técnicas, se crece con la larga e interminable nómina de dobladores, entre los que se ha incluido a Mariah Carey que canta el tema principal de la banda sonora en el papel de una gallina.

Oprah Winfrey dobla a un camello, Steven Yeun al burro protagonista, Kris Kristopherson al padre del pollino, Ving Rhames a un perro, Gabriel Iglesias a otro perro, Keegan-Michael Key a la blanca paloma, Patricia Heaton a la vaca, Anthony Anderson a una cabra, Kelly Clarkson a una yegua, Aidy Brian a la oveja, etc. De tal forma que se va completando el Belén viviente con un pesebre representado por todas las especies posibles.