A Maria Sole Tognazzi, cuyo apellido delata que es hija del recordado actor Ugo Tognazzi, le ha llegado la definitiva consagración con su tercer largometraje de ficción. Justo antes había realizado el documental «Ritratto di mio padre», donde aparecían Bernardo Bertolucci, Mario Monicelli, Pupi Avati, Carlo Lizzani y tantos otros cineastas que tuvieron el honor de dirigir a su progenitor; así como los actores que compartieron reparto con él, como Michel Piccoli o Michele Placido.

«Viaggio sola» ha sido el éxito sorpresa en los cines italianos, habiendo destacado en los premios David De Donatello, con una estatuilla a la Mejor Actriz para Margherita Buy.

Soledad elegida

Los tabúes sobre la soltería de la mujer van siendo superados en la sociedad actual, donde que una mujer viva sola no significa que no haya encontrado pareja o no pueda tenerla. Ser «single» es una elección libre para la mujer actual, dentro de los muchos modelos posibles de vida.

Las estadísticas confirman que el número de mujeres solteras y sin hijos va en aumento, convirtiéndose ya en un un grupo social influyente y merecedor de ser tenido en cuenta. La cracterización de Margherita Buy en «Viaggio sola» supone una revindicación de dicho perfil al alza.

Se trata de una mujer independiente y madura volcada en su profesión como inspectora de hoteles, lo que la tiene muy ocupada viajando. Se hace pasar por una cliente más, a fin de descubrir las malas prácticas de los establecimientos visitados. Su situación personal se complica sin embargo, cuando su mejor amigo, encarnado por Stefano Accorsi, le anuncia que va a ser padre de forma inesperada. Esto le hará replantearse su posición ante los demás.