REAL SOCIEDAD 2

ABERDEEN FOOT. CLUB 0

La Real resolvió con autoridad un partido muy peligroso porque se enfrentaba a un equipo inferior, pero que llegaba mucho más rodado y consiguió dos goles de renta, no encajó ninguno y además tuvo las opciones suficientes para dejar sentenciada la eliminatoria en un segundo tiempo en el que el Aberdeen bajó su nivel defensivo.

El equipo escocés no sería un rival peligroso dentro de dos meses, pero el mayor mérito de los blanquiazules fue demostrar su superioridad mediada la pretemporada. Fue capaz de jugar a un ritmo alto y lo más destacado es que tradujo su mayor nivel en el segundo tiempo, en el que metió sus dos goles, envió dos balones al larguero, tuvo una clara ocasión en la que Agirretxe no acertó a superar a Langfield y el alemán Dankert no quiso señalar un penalti por mano de Considine.

La Real mereció por juego y oportunidades sentenciar la eliminatoria, pero acudir el próximo jueves a Escocia con dos tantos de renta y sin encajar gol, lo que obligará al Aberdeen a marcar cuatro goles si los blanquiazules logran uno, es muy importante porque la eliminatoria era más difícil de lo que se podía esperar en una primera previa.

Una nueva Real

Además el mérito del resultado y del partido es mayor porque se vio una nueva Real y todo conjunto necesita un tiempo de adaptación a los cambios. Arrasate presentó un once en el que solo repetían tres jugadores del equipo alineado en el último partido de la pasada temporada ante el Villarreal, Iñigo, Markel y Pardo. Además cambió de sistema y con tantas variaciones no es fácil que un equipo funcione bien un 31 de julio.

El primer partido oficial de la Real sirvió sobre todo para ver la declaración de intenciones de su entrenador, con un equipo que se cierra en defensa y que con balón se abre con dos laterales que casi se convierten en extremos para compensar la ausencia de jugadores de banda de medio campo en adelante, con lo que Markel se colocaba entre los dos centrales para responder a una pérdida de balón.

Elustondo, que estuvo muy bien en su nueva posición de central, e Iñigo Martínez ofrecían una buena salida de balón y la Real combinaba con facilidad hasta las inmediaciones del área del Aberdeen, donde destacaba la movilidad de sus cinco jugadores más adelantados.

Los blanquiazules, pese a todo, tuvieron problemas en el primer tiempo para superar la acumulación de jugadores escoceses. El conjunto de Jagoba Arrasate tuvo en los primeros 45 minutos un 62% de posesión, pero sin poder traducirlo en ocasiones y goles.

Los de Derek McIness demostraron ser jugadores técnicamente muy limitados, pero en tareas defensivas trabajaron sin tregua y eso provocó que a la Real le costara crear oportunidades de gol. Sus tres primeros disparos llegaron en el ecuador del primer tiempo desde fuera del área por mediación de Xabi Prieto, con peligro, Zurutuza y Markel. Finngobason tuvo un remate claro de cabeza a salida de un corner en el que no estuvo bien, pero las dos oportunidades más claras antes de llegar al descanso las desperdiciaron el islandés tras una buena dejada de Chory Castro en un balón largo de Zurutuza y Pardo tras una combinación entre Xabi Prieto y Joseba Zaldua.

El Aberdeen no creó en todo el primer tiempo la más mínima preocupación al entramado defensivo realista, porque apenas tuvo balón y la mayoría de las veces que lo intentó jugar lo perdía en cuanto comenzaba la presión del equipo realista.

Un gol oportuno

El segundo tiempo resultó radicalmente diferente gracias en buena medida a lo pronto que llegó el gol de David Zurutuza en una de las oportunidades en las que Joseba Zaldua penetró con buen criterio en el área del Aberdeen. Finnbogason no remató bien su servicio, pero el despeje de Logan llegó a Zurutuza, que con la zurda marcó y dio confianza en la misma medida que menguó la del Aberdeen.

Derek McInnes intentó cerrar esa banda en la que había apostado por un jugador ofensivo como Hayes y colocó a un lateral, pero la Real fue a más y Markel tuvo un remate al larguero antes de que Canales ampliara la ventaja con un disparo con la izquierda ante el que no respondió bien Langfield.

Luego Iñigo Martínez remató a placer en un saque de esquina pero su cabezazo se estrelló contra el larguero y Agirretxe tuvo una clara oportunidad que desaprovechó en una segunda parte en la que físicamente la Real se impuso al Aberdeen cuando se podía temer lo contrario.

El equipo escocés mejoró en ataque en los últimos minutos con la entrada de Low y Goodwillie. Derek McIness quiso buscar un gol para llegar con opciones al partido de vuelta, pero solo inquietó a Zubikarai en un remate que el portero despejó bien en una jugada mal anulada por fuera de juego inexistente. También se equivocó el colegiado Dankert en los últimos minutos al no señalar un penalti en un balón que golpeó en el brazo extendido de Considine.

Buena respuesta

Entonces será un partido diferente, pero el más difícil era el de ayer, porque el debut oficial siempre presenta sus dudas, las de ayer más que justificadas que nunca por la ausencia de los jugadores más determinantes de las últimas temporadas como Griezmann y Vela y el equipo blanquiazul respondió bien.

Sobre todo hay que destacar la buena respuesta física porque el equipo fue de menos a más cuando está lejos del 100%. Además respondió el público y las novedades. Zubikarai estuvo seguro en su primer partido como portero titular de la Real, como Elustondo al hacer buena una decisión muy discutida en su nuevo puesto de central. Finnbogason no estuvo acertado, pero lo más importante para un delantero es tener ocasiones y el islandés las tuvo.

El Aberdeen no es un gran equipo, pero llegaba más rodado y ensamblado y el jueves anterior había sido capaz de ganar en el campo del Groningen. Era el peor rival que se podía encontrar en una primera ronda previa la Real y el equipo solventó con nota esa primera prueba que debe reforzar su confianza.