Hondarribia ganó en Bilbo su sexta bandera de la Liga San Miguel y tiene el título cada vez más cerca. Los entrenados por Mikel Orbañanos fueron los más fuertes en la exigente contrarreloj de la ría bilbaina, y sacaron dos puntos más de ventaja a Orio en la clasificación, adquiriendo un colchón de ocho a falta de dos regatas para que termine la competición.

Con la clasificatoria de La Concha a la vuelta de la esquina, la cita bilbaina tenía tintes de entrenamiento para buena parte de embarcaciones, pero no para las dos traineras inmersas en la lucha por el título, Hondarribia y Orio, ni para las que peleaban por evitar el play-off de descenso: San Pedro, Urdaibai y Astillero -en menor medida para los cántabros, ya que tienen plaza asegurada en la Liga ACT en la próxima edición-.

Así pues, los botes de la primera tanda salieron a por todas, sin especular, y marcaron unos tiempos muy a tener en cuenta. El mejor fue el de Urdaibai (19.24.96), pero después de mantener una cerrada pugna con Astillero y San Pedro. La cercanía del final de temporada se dejó notar en esa primera manga, en la que Pedreña (Pedro Manuel Cuesta) y Astillero (Iván Gómez) optaron por dar la alternativa a sus patrones suplentes.

Ninguna de las cuatro traineras de la segunda tanda fue capaz de mejorar el tiempo de la «Bou Bizkaia». Con sus deberes hechos en la Liga San Miguel, Zierbena, Portugalete, Tirán y Pasai Donibane eran probablemente las embarcaciones más centradas ya en la clasificatoria del próximo jueves, ya que su presencia en La Concha puede convertir una temporada mediocre en aceptable -caso de Portugalete o Tirán-, o un buen verano en un verano perfecto -caso de San Juan y Zierbena-. Además, se vio claramente que las condiciones de la marea, en plena bajada, no eran las más propicias para intentar superar los registros de Urdaibai.

Sentenció en el tercer largo

De hecho, la única que lo consiguió fue la «Ama Guadalupekoa», y eso que Orio salió más fuerte que ellos. Los amarillos marcaron el mejor tiempo de la tercera tanda en la primera ciaboga, aventajando en un segundo a Hondarribia pero sin poder mejorar los tiempos de la primera tanda. Y todavía en la segunda maniobra ambos perdían un segundo respecto a Urdaibai.

Fue en el tercer largo cuando Hondarribia sentenció la regata, metiendo cuatro segundos a Orio, todo un mundo en una contrarreloj en ría tan cerrada como la de ayer. El negocio les salió redondo a los verdes, porque intercalaron a Urdaibai en la segunda plaza y aumentaron en dos puntos su renta sobre los aguiluchos en la tabla. Cabo, con el jovencísimo Martín Leborán de patrón, no pasó de la octava plaza final; Kaiku, con una tripulación irreconocible y pensando ya en Donostia, se vio rezagado hasta la undécima.

«Los chavales han completado una regata magnífica. La marea estaba muy baja, la ría tenía poquísima agua, y la regata ha sido durísima. Nuestro objetivo era ganar al menos nuestra tanda, pero finalmente hemos podido batir a Urdaibai y estamos muy contentos», se felicitaba al final de la regata Frantxis González-Etxabarri, el delegado de Hondarribia.

Iñaki Arostegi, delegado de Orio, coincidía en señalar que «ha sido una regata durísima, no había más que ver las rocas que quedaban a la vista para comprobar que apenas había agua en la ría». Arostegi felicitó a Hondarribia por su victoria y añadió que «ahora lo importante será recuperar bien, porque los remeros se han dado una paliza hoy y el jueves tenemos otra regata muy importante». Sobre la cita donostiarra fue tajante: «En la clasificatoria solo hay un objetivo, clasificarse».

La tripulación ganadora de ayer en Bilbo fue la siguiente: Osertz Alday, Julen Castrillón, Iñigo Vértiz, Asier Puertas, Iker Marizkurrena, Manex Alday, Garikoitz Uranga, Xabier Etxebeste, Iñigo jauregi, Ekaitz Aznar, Agoitz Irazoki, Iñaki González y Gonzalo Carrión, con Ioseba Amunarriz de patrón.