Beñat ZALDUA BARCELONA
Procesos soberanistas

Mas mantiene el calendario y augura adelanto electoral si vetan la consulta

El president, Artur Mas, inauguró ayer el curso parlamentario catalán con un discurso que, sin aportar grandes novedades, destacó por sus duras palabras contra el Estado español. Confirmó el calendario según el cual convocará la consulta en los próximos días y dejó entrever que llamará a elecciones si el Estado veta la cita con las urnas. En cualquier caso, aseguró que consensuará los próximos pasos con el resto de partidos soberanistas.

Cuando hace unos meses al president de la Generalitat, Artur Mas, le preguntaban qué haría si el Estado español prohibía la consulta del 9 de noviembre, no tenía inconveniente en apuntar directamente hacia unas elecciones plebiscitarias. Ayer, tras la masiva Diada de la semana pasada y con la polémica sobre qué hacer en caso de veto estatal a la consulta en primer plano, el president se mostró más sutil y, tras señalar que le «gustaría» acabar la legislatura en 2016, recordó que no solo depende de él. «Para que así pueda ser, se debe poder votar el 9 de noviembre con plenas garantías democráticas», añadió en el discurso con el que inauguró el debate de política general del Parlament.

La frase dio pie, acto seguido, a titulares sobre la intención de Mas de anticipar las elecciones si el Tribunal Constitucional prohíbe la consulta, tal y como se espera.

Al margen de anuncios velados, Artur Mas reiteró que, una vez aprobada la ley de consultas el próximo viernes, convocará a las urnas para el 9 de noviembre, y que «consensuará las decisiones a tomar con las formaciones políticas proconsulta». Todo queda, por lo tanto, tal y como estaba, con un president que convocará la consulta, que querrá anticipar elecciones en caso de veto estatal, pero que tratará de consensuar las decisiones con los partidos soberanistas.

«Diferentes vías y direcciones»

La novedad radicó, probablemente, en el tono empleado por Artur Mas para referirse al Estado y al Gobierno españoles, de los que cabe entender que ya no espera nada: «Se habla de choque de trenes, pero para que exista, habría que ir por la misma vía y en dirección contraria. Catalunya y el Estado ya van por diferentes vías y en direcciones diferentes, no hay choque de trenes, lo que hay es un distanciamiento de los trenes».

«Resulta inverosímil, y al mismo tiempo sintomático, que ante una situación como la que se ha creado en Catalunya, el Estado no haya tomado ninguna iniciativa política, ni una sola», criticó el president, añadiendo que, dentro del Estado español se encuentran «en una vía muerta que no lleva a ningún lado».

En el apartado dedicado a la gestión de gobierno, que ocupó la parte central del discurso pronunciado, Mas acusó al Ejecutivo de Rajoy de llevar a cabo una «operación sistemática y continuada de desmontaje y destrucción del autobierno».

Mas no tuvo palabras tan duras, sin embargo, para valorar la acción de su Ejecutivo y considerar que «le estamos dando la vuelta a la situación». Para ello enumeró toda una serie de indicadores a modo de listín telefónico, dentro del cual quedaron sepultadas las conse- cuencias de cuatro largos años de recortes ininterrumpidos.

Con parte de razón, pero sin asomo alguno de autocrítica, el president culpó al Gobierno español de la «grave amenaza» que pende sobre las finanzas públicas, algo que choca con el anuncio, ratificado ayer por Mas, de que recuperarán la paga extra a los funcionarios en los presupuestos de 2015. Una promesa difícil de cumplir si tan mal están las cosas o un brindis al sol de quien está seguro que el Govern actual no tendrá que elaborar los próximos presupuestos.

Balance «pobre y sesgado»

Durante la intervención, también hubo palabras, veladas, acerca del «caso Pujol», sobre el que el president se limitó a anunciar «el compromiso inequívoco del Govern para erradicar la corrupción e instaurar las buenas prácticas».

Lo hizo en la parte del discurso dedicado a la transparencia, un ámbito en el que Artur Mas sacó pecho después de aparecer como la institución más transparente del Estado en una clasificación de Transparencia Internacional, una ONG que en su día declaró Sabadell como el municipio más transparente del Estado. El alcalde entonces, el socialista Manuel Bustos, está ahora imputado por numerosos delitos de corrupción.

Tras el discurso, todos los partidos coincidieron en definir como pobre y sesgado el balance presentado por Artur Mas sobre la obra de su Gobierno, aunque el tema estrella de la consulta dividió, como es lógico, a la oposición.

PSC, PP y Ciutadans consideraron que el anuncio velado de anticipo electoral supone el fracaso del proceso, mientras que ERC e ICV-EUiA trataron de no echar más leña al fuego en este ámbito y se limitaron a recordar a Mas que mantener la convocatoria de la consulta está en sus manos.

La CUP, por su parte, negó el anticipo electoral como solución viable. En cualquier caso, el turno de los partidos llegará hoy, en el segundo día de debate de política general.

La ANC deja en manos del Parlament 750.000 peticiones de independencia

«En el supuesto de que el Estado español no permita, impida o dilate la celebración de una consulta democrática o unas elecciones plebiscitarias, o no reconozca los resultados, quiero que esta petición sea una manifestación libre de mi voluntad favorable (voto) para que los representantes electos del pueblo de Catalunya declaren la independencia». Casi 750.000 personas han firmado en los últimos meses esta petición a instancias de la Assemblea Nacional Catalana (ANC), que ayer entregó toda la documentación al Parlament, dando por finalizada la campaña `Firma un voto por la independencia', que en los últimos meses ha llevado a cabo en todo el territorio catalán gracias a la colaboración de la Associació de Municipis per la Independència.

No se trata de una recogida de firmas tradicional, sino de una campaña basada en el derecho de petición, una figura jurídica reconocida por el derecho internacional, por la Constitución española y por el Estatut catalán, según la cual todo ciudadano tiene el derecho de dirigirse a sus representantes políticos para trasladarles una petición concreta, sin ningún tipo de condicionantes. En este caso, los 750.000 firmantes de la petición de la Assemblea Nacional Catalana reclaman al Parlament, en primer término, que «lleve a cabo todas las iniciativas políticas para que se pueda celebrar una consulta democráticamente y políticamente vinculante».

En segundo término, como se ha visto, la petición aboga por la Declaración Unilateral de Independencia.

La presidenta del Parlament, Núria de Gispert, fue la encargada de recibir las peticiones y dar la bienvenida a una delegación encabezada por la presidenta de la Assemblea Nacional Catalana, Carme Forcadell, que aprovechó la ocasión para -pocas horas antes de que el president, Artur Mas, subiera a la tribuna de oradores del Parlament- recordar que «la Assemblea no dará ni un paso atrás hasta conseguir la independencia de Catalunya». B. ZALDUA

«Junior» niega el cobro de comisiones

Casi dos años después de ser denunciado por su examante y a menos de dos meses para la consulta sobre el futuro de Catalunya prevista para el 9 de noviembre, el primogénito y tocayo del expresident Jordi Pujol, Jordi Pujol Ferrusola -más conocido como `Junior'-, declaró ayer ante el juez Pablo Ruz imputado por presuntos delitos de fraude fiscal y blanqueo de capitales.

También lo hizo, en las mismas condiciones, su exmujer, Mercè Gironès, tras lo cual ambos quedaron en libertad, ya que ni la Fiscalía Anticorrupción ni la Abogacía del Estado pidieron medida cautelar alguna.

Según informaron posteriormente las agencias, Pujol negó durante las cinco horas de declaración haber cobrado ninguna comisión ilegal a cambio de contratos públicos con la Generalitat gobernada por su padre, tal y como dan a entender los informes policiales divulgados por la prensa madrileña.

El juez Ruz considera sospechosos los movimientos acreditados de 32 millones de euros a lo largo de ocho años y en trece países por parte de `Junior', así como el hecho de que todos los pagos recibidos por el primogénito proviniesen de empresas contratistas de la Generalitat.

También resultan polémicos los conceptos por los que se pagaron dichas cantidades, ya que de ser ciertos, Jordi Pujol Ferrusola resultaría ser un experto asesor en temas tan variados como la red eléctrica de Gabón, el mercado inmobiliario o las plantas solares, que son los conceptos por los que diversas empresas le pagaron. B.Z.