Juanjo BASTERRA

La OIT afirma que los recortes llevan a los pensionistas a mayor pobreza

La OIT sostiene en un estudio que la protección social para las personas de edad por medio de pensiones justas que garanticen una vida digna es un derecho humano. Denuncia que los países avanzados han recortado y dificultado el acceso a las pensiones que, a juicio del organismo internacional, tienen que ser públicas. De hecho, da cuenta de la reversión que se produce en países que las privatizaron.

La Organización Internacional del Trabajo (OIT) recuerda ante el Día Internacional de las Personas Mayores la necesidad de garantizar «la protección social para las personas en edad». El derecho a una pensión es parte de las normas internacionales de los Derechos Humanos, confirma OIT.

Advierte de que aproximadamente la mitad -el 48%- de las personas «que superan la edad que da derecho a la pensión no reciben pensión alguna» y, en muchos casos, «no es adecuada para vivir de una manera digna». Esa realidad conlleva que «la mayoría de las mujeres y de los hombres de edad no tienen una seguridad del ingreso, carecen de derecho a la jubilación y deben continuar trabajando -a menudo mal remunerados y en condiciones precarias-».

Para la OIT, esta laguna «debe taponarse». Según explica, más de 45 países integrados en esa organización han alcanzado un 90% de cobertura en pensiones, y «más de 20 países en desarrollo lograron la cobertura universal o prácticamente universal».

Tan importante como extender la cobertura de las pensiones es garantizar que los niveles de pensión sean adecuados. Lograr niveles de pensiones adecuados es un problema de carácter mundial. OIT advierte de que los países que «están llevando a cabo una consolidación fiscal están reformando sus sistemas de pensiones para reducir costos, incluido el retraso de la edad de jubilación, la reducción de las prestaciones, la falta de indexación y el aumento de las tasas de cotización, entre otras medidas».

A su juicio esos ajusten «socavan» la adecuación de los regímenes de pensiones y reducen la capacidad de prevenir la pobreza en la edad avanzada. «Es alarmante el hecho que los futuros pensionistas recibirán pensiones más bajas en al menos 14 países de la UE», precisó.

Esa realidad genera que 123 millones de personas en la Unión Europea el 24% de su población viva en la pobreza por los recortes que se están produciendo. Recuerda que varios tribunales europeos determinaron que esos recortes son inconstitucionales. «El costo de los ajustes se ha trasladado a la población», denuncia. Recuerda por último, que los sistemas públicos de pensiones son el futuro y advierte de que algunos países, como Argentina, Bolivia, Chile, Hungría, Kazajistán y Polonia, «están revirtiendo las privatizaciones de los sistemas de pensiones anteriormente implementadas durante los 80 y 90. Estos sistemas eran costosos e incapaces de extender la cobertura de las pensiones de vejez».

26.000 navarros

Por otro lado, la plataforma navarra Mayores frente a la Crisis, que agrupa a ANAPP, Aroa, FPJ de CCOO, A. de M Lacarra, UPJ de UGT, Nafarroako Pensionistak Martxan, Sasoia, se concentrarán hoy a las 12.00 ante la Diputación «para hacer oir la voz contra quienes hacen empobrecer a la población».

Recuerdan que «26.000 personas mayores viven en el umbral de la pobreza. Nuestra dignidad no es negociable», preci- san en un comunicado.