Raimundo Fitero
DE REOJO

Unanimidad

Como siempre, la derecha española hace todo por unanimidad. Es una de las características de esa manera rancia de entender la singularidad, actuar por unanimidad. Los llamados aparatos del Estado son una serie de organismos habitados por privilegiados seres que reciben unos emolumentos para estar allí para cuando suene el silbato responder por unanimidad. No hay discrepancia alguna. Todos los magistrados, jueces, consejeros en general nombrados por la Gran Coalición de la Derecha Españolista, PPSOE, votan siempre por unanimidad. Solamente hace falta un gesto de los que les nombran y allí responden ellos, como un cuerpo de Ejército bien entrenado para firmar sin leer lo que les ponen delante. Y por unanimidad.

No es precisamente el señor Mas un hombre metafórico o capaz de generar empatías por su simpatía, pero estuvo bien al señalar la inusitada rapidez con la que el Tribunal Constitucional fue convocado, se reunió y decidió, por unanimidad, naturalmente, que se debía admitir a trámite la demanda del unánime gobierno de Rajoy respecto a la ley de consultas y la convocatoria para el 9-N aprobada por un gobierno legítimo de la Generalitat por mandato parlamentario. Sorprende que sean capaces de leerse una ley, un recurso, dos mamotretos más, el «Marca» y resolver. Yo diría, sin conocimiento de causa, que cuando llegaron a la sede del TC, ya les habían preparado la declaración de suspensión, con argumentarios de la tautología actual, porque todo estaba ya atado y bien atado desde hace tiempo.

Las televisiones ante estas rapideces de nuevo tuvieron ritmos cambiados. TVE está en otros asuntos, las generalistas comerciales van y vienen, los programas informativos se encuentran ante la noticia anunciada convertida en una realidad que no saben cómo analizar. Los tertulianos siguen con su cantinela de flechas en un campamento ¿Y ahora qué? Pues, nada unanimidad a montones.

Sin leer nada hay que repetir el catecismo que dice que la consulta es ilegal, es inmoral y engorda. Y quedarse tan panchos. O ser Iturgaiz, ponerse fino de lo que sea y decir lo que se te ocurra, siempre y cuando aparezca la palabra ETA, también por unanimidad.