Mikel INSAUSTI
Zinema kritikaria
CRíTICA: «Así nos va»

Rob Reiner tocando la misma vieja canción

Alos yanquis les gusta mucho el refrán «si la vida te da limones, haz limonada». Por eso, dentro de su mercado cinematográfico, al igual que en el discográfico o en el literario, está muy instalada la idea de que si un artista conoció un gran éxito en su carrera no hay necesidad de cambiar, y se puede pasar el resto de su vida repitiendo la misma creación las veces que haga falta. Rob Reiner se aplica el cuento haciendo la misma comedia romántica desde que se consagrara con «Cuando Harry encontró a Sally».

Tampoco importan mucho los 25 años transcurridos desde aquel triunfal estreno, porque se supone que hay un público potencial que añora la película y el romanticismo propio de lo que entonces pudo ser el comienzo en su vida particular de una relación, seguramente hoy marchitada. Para que el recuerdo nostálgico no conlleve riesgo de depresión, lo que se hace es buscar una pareja estelar más talludita, a fin de que represente la posibilidad de recuperar el amor a los 60. Para eso están Michael Douglas y Diane Keaton, que se conservan bastante bien y siguen de buen ver, lo suficiente para transmitir un corriente de optimismo al respetable.

El otro factor indispensable en la ecuación es el guion, que corre a cargo en «Así nos va» de Mark Andrus, a su vez conocido por el taquillazo de «Mejor imposible», una comedia que nos convenció de que hasta un tipo entrado en años y rarito puede encontrar su segunda oportunidad sentimental.

El tipo interpretado por Douglas hijo también es un viejo gruñón, que descuida las relaciones personales y cuyo interés como agente inmobiliario es vender una última casa millonaria para poder retirarse. El perdido sentimiento familiar le volverá cuando tenga que cuidar a su nieta, de la que no había querido saber nada. La pequeña será el revulsivo para su recuperación del cariño, también dentro de la pareja, gracias a que tendrá que recurrir a la vecina para que haga de canguro. Y ahí aparece Diane Keaton en un papel que se sabe ya de memoria.