«El Gobierno nos decepciona, porque el acuerdo sobre la Lomce es un ejercicio de postureo. [...] Y es mucha casualidad que tres grupos digan lo mismo». Estas palabras, pronunciadas por la parlamentaria del PSE Isabel Celaá, evidencian a soledad de la consejera de Educación, Política Lingüística y Cultura, Cristina Uriarte, que ayer compareció en la Comisión de Educación del Parlamento de Gasteiz para explicar los pormenores de un acuerdo alcanzado con Madrid con el objeto de «minimizar» el impacto de la Lomce en la CAV.

En su intervención, la consejera hizo hincapié en el valor jurídico del acuerdo, en el que se establece que la enseñanza del euskara es competencia exclusiva de Lakua. «La ley no cambia, se hace una interpretación que nos da seguridad jurídica», manifestó tras anunciar que el Gabinete jeltzale mantendrá el recurso contra la Lomce ante el Tribunal Constitucional. «Es una ley orgánica y la tenemos que cumplir, no obstante emplearemos todas las herramientas disponibles para defender nuestro sistema educativo», añadió.

Las explicaciones de Uriarte no fueron bien recibidas por los grupos de la oposición, que censuraron las formas empleadas por la consejera para dar a conocer el acuerdo. Así, Belen Arrondo cargó contra el Ejecutivo autonómico por mantener en secreto el acuerdo, firmado el pasado 29 de agosto, durante un mes. «No entendemos porque no se anunció hasta el día 29 de setiembre, cuando se público en Boletín Oficial del País Vasco. Creemos que hay que trabajar con más trasparencia», afirmó la parlamentaria de EH Bildu, que considera que el acuerdo perpetúa el sistema de modelos y cierra la puerta a la inmersión lingüística.

Consejo escolar

Por su parte, Celaá preguntó a Uriarte cómo piensa articular las relaciones entre la dirección de los centros y los órganos colegiados de participación, cuya regulación queda establecida en la Lomce. La consejera se limitó a anunciar que su departamento trabaja en el desarrollo de la norma. «Dejenos trabajar, y cuando tengamos la norma la anunciaremos», afirmó tras señalar que, gracias al acuerdo, el Gabinete de Iñigo Urkullu podrá regular las relaciones entre la dirección de los centros educativos y el consejo escolar.

Desde el PP, Iñaki Oyarzábal matizó que el acuerdo no es una modificación de la Lomce, sino una «escenificación» del Gobierno. «Habían hecho una mala interpretación de la Lomce. Les han puesto la ley sobre un papel para que puedan ponerse una medalla», concluyó.