Alasdair Fraser es un brillante músico escocés especializado en la música tradicional de su país. Empieza a tocar el violín a los 8 años, animado por toda una familia de músicos. En 1973 gana el concurso de violín del National Mod. Se licencia en físicas por la Universidad de Edimburgo y trabaja como petrofísico para la British Petroleum Corporation. En 1981 se traslada a EEUU. Cuatro años más tarde ese cerebrito repleto de matemáticas dice que deja los números y las corporaciones. Apuesta por la felicidad del violín y la alegría de la música tradicional.

Alasdair ha obtenido reconocimiento internacional como principal intérprete, artista discográfico y profesor de la rica tradición violinista de su Escocia natal.

Ha trabajado con la cantante Jean Redpath, con el pianista Paul Machlis y con el guitarrista Tony McManus, y ha colaborado con grupos tan variados como la Master Chorale de Los Ángeles, los Waterboys o los Chieftains y ha compartido una actuación como solista en el Lincoln Center de Nueva York con el violinista clásico Itzhak Perlman. Ha representado internacionalmente a Escocia en actuaciones patrocinadas por el Consejo Británico. Desde hace unos años comparte escenario con la chelista escocesa Natalie Haas.

Entre dúos y álbumes solistas, Fraser lleva grabados quince álbumes, cuatro de ellos con Haas, aunque esta ya colabora en discos previos como invitada. En la actualidad presentan «Abundance», que acaba de publicarse.

Aburruzaga

El portugalujo Xabi Aburruzaga, de 36 años, conoció a este dúo el año pasado en el concierto que la pareja ofreció en el Kursaal donostiarra el 24 de octubre. Aburruzaga es un excelente trikitrilari, pero también un músico de amplio recorrido, por lo que en tiempo mínimo fue capaz de adecuarse a tres de las canciones del repertorio del dúo escocés. Estos no se quedaron atrás y le correspondieron participando en tres creaciones del músico vasco.

«Son músicos con letras mayúsculas, con un gran talento. Pero en cuanto bajan del escenario son gente de andar por casa, humildes y siempre con una sonrisa en la cara. Además tienen un gran respeto y admiración por la cultura de Euskal Herria. De hecho, Alasdair y Natalie colaboraron en un disco que me encanta de Arkaitz Miner y Juan Arriola que se titula `Hariari tiraka'», explica Aburruzaga. Comenzó a tocar la triki a los 12 años, «aunque me inicié con el acordeón de piano a los 7. Mis aitas escuchaban mucha trikitixa, Rufino Arrola, Fasio Leon eta Maurizia, Basilio eta Txilibrín, Laja eta Landakanda.. y creo que por ahí me viene la afición. Mi aita y mi ama son un pilar importante en mi música. Así como ser de Portugalete. Creo que si hubiese nacido en un baserri mi visión musical seria menos cosmopolita».

¿Conexión internet para colaborar? Nada de eso. «Vamos trabajando por separado. Yo me preparo un guion del tema, y como el día del concierto vamos a estar todo el día juntos, pues ahí se va puliendo todo. La otra vez así lo hicimos y salió todo rodado».

De momento han preparado tres canciones para compartir, pero Aburruzaga, que marcha en estos momentos de charla para San Mamés (no ha sido gafe, 3-1), advierte que habrá sorpresas. Prepara material nuevo, pero «Geure», sigue muy vivo.