Decenas de personas se dieron cita ayer en la Fábrica de Orbaizeta para recordar a Mikel Zabalza, cuyo cadáver apareció hace 29 años a orillas del Bidasoa tras ser detenido por la Guardia Civil. Pese a que el Estado español sostiene que se ahogó en el río, a donde, según la versión oficial, saltó para tratar de escapar, las pruebas apuntan a que el joven falleció en el cuartel de Intxaurrondo.

«Te mató la Guardia Civil, te mataron los funcionarios al servicio y sueldo del Estado español. [...] La misma Guardia Civil y sus superiores en la Delegación del Gobierno y en el Ministerio del Interior se encargaron de hacer todo lo posible para que el crimen quedara impune», denunciaron los miembros de la plataforma «Mikel Zabalza gogoan», que reivindicaron verdad, justicia, reparación y reconocimiento. Asimismo, la familia de la víctima mostró su confianza en que algún día se esclarezca lo ocurrido.

Por su parte, EH Bildu, que el viernes mostró su apoyo al acto de Orbaizeta, afirmó que Mikel Zabalza, como todas las víctimas, necesita reconocimiento y justicia, ya que, a su parecer, «no se podrá construir una verdadera convivencia en Navarra y en Euskal Herria sin el reconocimiento de todas las víctimas, sin exclusiones, ni grados». «No puede haber víctimas de primera y de segunda», añadió la coalición.

El próximo fin de semana el Ayuntamiento de Donostia organizará un acto institucional en recuerdo del joven orbaizetarra, que residía en la capital guipuzcoana cuando fue detenido por la Guardia Civil.