En sus últimas cinco visitas a Anoeta, los rojiblancos han ganado dos veces y han perdido las otras tres, entre ellas las dos últimas temporadas y por idéntico marcador, 2-0. Y prácticamente siempre son partidos con goles -el último 0-0 data de la 1996-97-. Números que avalan un derbi como siempre igualado, resuelto en chispazos y donde -como avisó el viernes Ernesto Valverde- el juego a balón parado puede resultar decisivo para romper ese equilibrio. Ahí el Athletic es el segundo equipo, tras el Alético, que más tantos firma a balón parado.

En total son ya 5 dianas a raíz de este tipo de jugadas las que han logrado los leones, en tanto los realistas no han conseguido ni un solo tanto aprovechando estas situaciones. Agirretxe, por ejemplo, es el segundo jugador que más remata de cabeza en la Liga, y hoy estará ausente. Lo más llamativo es que la Real suma 33 remates a balón parado y el Athletic 32, siendo segundo y tercero, respectivamente, en esta clasificación tras el Madrid.

Ernesto Valverde ya advirtió el viernes que los donostiarras defienden los córners en zona, como lo hizo el Córdoba, y ahí es más difícil aprovechar esas situaciones. Veremos si los San José, Aduriz o Laporte consiguen volver a sacar tajada de estas jugadas estratégicas que tanto le están dando al Athletic en las últimas fechas, a falta de gol a partir de jugadas colectivas o individuales.

No es el único punto que da ventaja a los bilbainos. A favor de ellos también juega un dato más estadístico: no han perdido un 14 de diciembre desde el año 1952, y desde entonces han disputado 7 encuentros, habiendo ganado los cinco últimos. No debería haber sexto malo.

Pero las cábalas se esfuman cuando el colegiado indica el comienzo del choque. Mucho corazón y menos cabeza, como dijo el técnico rojiblanco, a partir de ese momento. Txingurri ya avisó de que ponerse por delante en el marcador sería importante, pero no suficiente ante una Real que ha sido capaz de levantar marcadores adversos ante Real Madrid o Atlético. Todo lo contrario que el Athletic. Los leones son el único equipo que aún no ha conseguido sumar un solo punto cuando ha empezado por debajo en el marcador, curiosamente todo lo contrario de la temporada pasada, en lo que se especializó.

En Anoeta todo indica que Aduriz volverá a la punta de ataque, con lo que a priori la capacidad ofensiva cotiza al alza, y habrá que ver si Susaeta sigue en la línea ascendente demostrada en sus dos últimas participaciones. Los únicos cambios en el once de Valverde podrían tener lugar arriba, quizá con la inclusión de Unai López en detrimento de un Beñat a quien puede que Txingurri no quiera precipitar. O apostar por el guipuzcoano en banda por Muniain, si bien dos `banquillos' para el navarro quizá sería mucho. Más cábalas, por si no hubiera pocas. Ahora hay que rubricarlas en el césped de Anoeta.