El parlamentario de EH Bildu Oskar Matute acusó ayer al PNV de «subir el tono y atacar» a la coalición soberanista para «ocultar sus miserias». Además, criticó al Gobierno de Lakua por pactar con «un PSE en horas bajas a cambio de migajas para perpetuarse en el poder».

En rueda de prensa en Bilbo, Matute afirmó que en un balance del ecuador de la legislatura del Gobierno de Iñigo Urkullu, EH Bildu constató que «estamos a mitad de un camino hacia ninguna parte». «Tenemos un ejecutivo que no solo no ha mejorado las condiciones de vida de los hombres y las mujeres que viven en nuestro país, sino que, de hecho, las ha empeorado a través de políticas orientadas a beneficiar a quienes más tienen mientras sigue recortando derechos y servicios públicos excusándose en la crisis», afirmó.

El parlamentario de EH Bildu cree que el Gobierno de Lakua «tan solo tiene claro que debe perpetuarse en el poder» y, por ello, «no duda en pactar con cualquiera que le garantice un mínimo de estabilidad a cambio de migajas. No dudamos de que un PSE en horas bajas es el mejor aliado para el PNV. Lo demuestran al aceptar políticas de recortes que dejan a cada vez más gente en situación de vulnerabilidad cuando no directamente bajo el umbral de la pobreza». Además, apuntó que, «pese a todo, Urkullu lleva más de medio año hablando de mejoría de la economía vasca». En este punto, dijo desconocer si «se refiere a las grandes empresas que siguen bajando sueldos mientras aumentan dividendos como Arcelor de Agurain o Edesa de Basauri».

Sin avances

Junto a ello, afirmó que Urkullu «ofrece similares avances» en materia de normalización política, «con un PNV que demuestra nerviosismo y no saber dónde colocarse cada vez que alguien pone un tema delicado sobre la mesa».

«Cero avances y más palos en las ruedas en forma de operaciones policiales delirantes o una incomprensible falta de apoyo a la reivindicación mayoritaria de la sociedad vasca en pro de los derechos de las personas presas», señaló el parlamentario soberanista.

Matute afirmó que «el PNV no quiere construir país de la mano de la ciudadanía y los agentes sociales y políticos» y rechaza los llamamientos de EH Bildu a avanzar en euskal bidea, la vía vasca. «Tampoco quiere apostar por el derecho a decidir de la sociedad vasca; no quiere arrancar ni participar de un proceso constituyente para avanzar hacia una Euskal Herria soberana porque prefiere seguir buscando acomodo en un sistema que le convierte en sucursal del régimen de Madrid», añadió.

En opinión de Matute, «el resultado de esta lamentable gestión es la creciente desconfianza que siente la ciudadanía frente al Gobierno de Urkullu y las instituciones, tal y como ha recogido el Euskobarómetro». Recordó que «la mayoría de la sociedad, tres de cada cuatro personas, considera que este lehendakari no hace lo suficiente frente a la crisis y el desempleo y, además, lamenta el inmovilismo de cara a la celebración de una consulta que determine la voluntad mayoritaria del pueblo vasco».