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Con un escaso poder movilizador, la AVT fracasa en sus críticas al PP

Apenas unos cientos de personas secundaron ayer en Madrid la convocatoria de la AVT bajo el lema «No más traiciones». El discurso de su presidenta, Ángeles Pedraza, contra un Gobierno español que «no hace nada» en la lucha contra ETA fue «respetado» pero no compartido por el PP en la CAV. Arantza Quiroga respondió «que es muy fácil desde sillones de Madrid y en tertulias hablar de traidores».

La imagen que ofrecía ayer la movilización de la AVT bajo el lema «No más traiciones» poco o nada tenía que ver con otras de años precedentes, cuando sus convocatorias lograban aglutinar a miles de personas. Ayer, en una plaza Colón en la que ondearon banderas españolas y falangistas y se proclamaron mensajes rupturistas dirigidos al presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, quedó en evidencia que el poder de convocatoria de la asociación que preside Ángeles Pedraza no atraviesa su mejor momento. Tras recriminar al Ejecutivo español que en más de tres años de legislatura «no ha hecho nada» contra ETA más que seguir la hoja de ruta del anterior Ejecutivo, el de José Luis Rodríguez Zapatero, Pedraza señaló que «estamos aún peor que hace tres años» porque, pese a creer que el Gobierno español no ha negociado con la organización vasca, más de cien presos están en libertad, «son recibidos y enterrados como héroes» y «ETA está en las instituciones».

Tras enumerar el listado de «tareas pendientes», como la detención de todos las personas con causas pendientes, el desmantelamiento de zulos o iniciar la ilegalización de partidos «afines a ETA», la presidenta defendió que el Estado español necesita gobernantes que tomen la iniciativa: «Gobernantes que muestren coraje democrático y claridad moral. Que no se arruguen, ni se pongan de perfil ni traicionen nuestra confianza».

Sobre las promesas que a su juicio ha incumplido el PP, Pedraza, aludió a los compromisos de ilegalizar EH Bildu, Sortu y Amaiur, de reparación de las víctimas de ETA a través de la justicia, de permitir a «los exiliados por culpa de ETA» votar en sus lugares de origen y de «impedir actos de enaltecimiento del terrorismo».

El PP en la CAV, en desacuerdo

A estas críticas lanzadas en Madrid respondió desde Donostia la presidenta del PP en la CAV, Arantza Quiroga. Aseguró «respetar» estas opiniones pero puntualizó que no las comparte «porque vive una realidad en el País Vasco» y conoce «lo que trabajan los concejales del PP en su día a día». «No es justo que se diga esto», añadió.

Tras recalcar que suscribe «de la A a la Z» el discurso que pronunció el viernes el expresidente español José María Aznar en la apertura de la convención del PP, Quiroga señaló que «es muy fácil desde sillones de Madrid y en tertulias hablar de traidores y de quiénes se han relajado en su lucha contra el terrorismo», mientras miembros del PP «dan la cara en el País Vasco» y «se enfrentan a esa situación».

Sobre las palabras de Pedraza, el presidente del PP en Gipuzkoa, Borja Sémper, dijo sentir un «respeto profundo y sincero a las víctimas, pero también una discrepancia sincera y profunda». A su juicio, si ha habido algún partido que ha tenido una política «inequívoca» contra el ETA, ese partido «ha sido el PP».

La AN reabre el sumario por el atentado contra Gregorio Ordóñez

La Audiencia Nacional ha reabierto el sumario por la muerte en 1995 de Gregorio Ordóñez y está investigando la implicación de más personas, según anunció ayer la hermana del concejal del PP y presidenta de Covite, Consuelo Ordóñez, durante el acto de homenaje celebrado en el cementerio de Polloe, en Donostia, en el vigésimo aniversario del atentado.

Como cada año, familiares y amigos recordaron al edil donostiarra. Al acto acudieron la presidenta del PP en la CAV, Arantza Quiroga, el exministro Jaime Mayor Oreja o la expresidenta del PP en la CAV, María San Gil, entre otros.

Ordóñez consideró que «algo se está haciendo rematadamente mal» si el «aislamiento de los violentos» es una de las tres puntas del triángulo de la libertad, y Bildu, Sortu y Amaiur «han sido legalizados sin condenar la trayectoria de ETA y su objetivo estrella es conseguir la impunidad para los presos de ETA». «No es un portazo, es una crítica hecha para provocar la reflexión, el cambio. Aún estamos a tiempo. Pero hace falta trabajo, no palabras o fotos», añadió. GARA