Iñaki IRIONDO

La familia de Zengotitabengoa expone su dura situación y pide ayuda en el Parlamento

La familia del preso Andoni Zengotitabengoa expuso en el Parlamento de Gasteiz la dura situación que padece en la prisión de Monsanto de Lisboa, las afecciones que eso tiene para sus hijas y pidió que se tomen iniciativas para acabar con ese trato excepcional e irregular.

La familia de Andoni Zengotitabengoa, preso en la cárcel de Monsanto en Lisboa, sometido a 22 horas de aislamiento diarios y sin apenas posibilidades de contacto con sus hijas, describió ayer ante la Comisión de Derechos Humanos la dura situación a la que es sometido, y pidió ayuda al Parlamento, para que interceda ante las autoridades portuguesas procurando que se le levanten las condiciones excepcionales e irregulares a las que se ve sometido.

Iera Abadiano, esposa de Zengotitabengoa, su madre, la psicóloga de una sus hijas y el abogado del preso, Iñaki Goioaga, describieron su situación en la cárcel de máxima seguridad, en la que está recluido tras ser detenido en marzo de 2010 acusado de pertenecer a ETA y tenencia de explosivos.

Abadiano informó a los parlamentarios de que Andoni Zengotitabengoa se ve obligado a vestir con un mono naranja, «como los de Guantánamo», pasa aislado casi toda la jornada y sufre diez registros diarios. Pese a tener dos visitas semanales, como solo puede acudir la familia más directa, muchas de estas se pierden, puesto que son 1.800 kilómetros de viaje y un enorme coste. Las visitas tienen lugar a través de un cristal, y cuando pueden acudir sus hijas, éstas no ven a su padre salvo que les aúpe un adulto. Zengotitabengoa está cursando el tercer curso de la licenciatura de matemáticas y hasta hace poco no podía tener ni una calculadora.

Situación irregular

La sicóloga describió el daño que todo esto esta produciendo en las hijas del preso, que no pueden abrazar nunca a su padre. En el único vis a vis anual concedido están separados por una mesa y con un policía armado en la sala.

Iñaki Goioaga, abogado de Zengotitabengoa, explicó que la situación del preso vasco está agravada porque tras su condena en Portugal se mantuvo una orden de busca y captura de la Audiencia Nacional que ya había prescrito, como luego reconoció el tribunal español.

Según los propios informes de la prisión, el comportamiento de Zengotitabengoa es modélico. Sin embargo, no hay forma de que el director de la cárcel le retire el régimen penitenciario de «seguranza».

La familia y el abogado de Zengotitabengoa pidieron al Parlamento que se sume a las instituciones que están dirigiéndose al director de la cárcel, a las Instituciones Penitenciarias lusas y al propio ministro de Justicia, para que se suprima la situación de excepcionalidad del preso de Elorrio.

Resultó significativo que tras escuchar el relato de la esposa de Zengotitabengoa y el conocer la situación de sus hijas, ni el representante del PP, Carmelo Barrio, ni el del PSE, Mikel Unzalu, tuvieran nada que preguntar.