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SEÚL

Seúl amenaza a los surcoreanos tras la masiva marcha contra sus medidas

El Gobierno surcoreano prometió ayer acabar con cualquier nuevo intento de «protestas violentas» tras el arresto el sábado de decenas de personas en la mayor concentración, en este caso contra sus reformas laborales, del mandato de la presidenta Park Geun Hye.

«El Gobierno estaba totalmente preparado para garantizar una marcha pacífica y de acuerdo con la ley, pero ciertas personas acudieron armadas con tuberías de acero e iniciaron una conducta violenta», declaró el ministro de Justicia Kim Hyun Woong.

En la concentración para protestar contra medidas educativas y laborales del Gobierno participaron unas 130.000 manifestantes. Se trata de la mayor protesta por número de manifestantes desde 2008, cuando tuvieron lugar varias marchas multitudinarias contra la decisión del Ejecutivo de reanudar las importaciones de carne de res de EEUU, según datos de la Policía.

Reforma laboral

La protesta tuvo lugar en la tarde del sábado en la simbólica plaza de Gwanghwamun de la capital, y había sido convocada por 53 sindicatos y organizaciones surcoreanas para expresar el rechazo contra la reforma del mercado laboral y la revisión de los libros de historia que ha impulsado el Gobierno que lidera Park Geun-hye.

La manifestación se prolongó hasta la noche y derivó en enfrentamientos violentos entre manifestantes armados con tubos y barras de metal y los antidisturbios, que trataron de repelerlos con cañones de agua, informó la agencia local Yonhap. La Policía arrestó a 51 manifestantes, 49 de los cuales pasarán a disposición judicial.