Israel Escalante Meson

De nuevo la autogestión a juicio

El proyecto de huertos urbanos amparado por Ekologistak Martxan en Barakaldo «La Huertaka», en activo desde octubre de 2013, se enfrenta el próximo 6 de abril a un nuevo proceso judicial por denuncia del Sareb o Banco Malo.

La Huertaka, proyecto autogestionado reconocido y con gran aceptación en el barrio de Lutxana, se ubica en los terrenos que ocuparon los chalés de Orconera, derribados por orden del señor Suances para dejar un una escombrera que apenas se recogió un poco días antes de las últimas elecciones municipales.

A modo de banderita yanqui en la Luna, la inmobiliaria Solvia (del Banco Sabadell) ha colocado de nuevo su cartel promocionando la venta de este terreno, que aunque no es suyo gestiona en base a un acuerdo al que llegó en 2015 con SAREB. Decimos de nuevo porque anteriormente colocó ya otro más pequeño, que acabó llevándose el viento con el peligro que esto podría suponer para transeúntes por el paseo adyacente.

El Banco Malo cede por tanto a Solvia, que es la inmobiliaria que el Sabadell montó para gestionar los numerosos inmuebles acumulados tras ejecuciones inmobiliarias (vamos, desahucios), la gestión de este solar, pasando por un nuevo desahucio, en este caso no de una vivienda sino de los terrenos recuperados para la Huertaka.

Precisamente en este barrio son varios los proyectos constructivos parados, pero es especialmente destacable el de Sefanitro, así que, ¿cómo de urgente es construir viviendas en Serralta cuando en Sefanitro apenas se va a finalizar una pequeña parte de lo proyectado? Y sobre todo, ¿qué necesidad real hay de vivienda nueva en un municipio con más de 2.000 viviendas vacías? ¿Aún no hemos aprendido que el del ladrillo no es un modelo de crecimiento sostenible? Pero además, cuando el propio PNV llevaba en su programa la promoción de huertos urbanos e incluso lo han recogido en eso a lo que se han atrevido a llamar presupuestos participativos, ¿por qué alcaldía no respondió a este colectivo al respecto, ya fuera bajo mandato del PSE o el actual del PNV?

Los espacios de esparcimiento del municipio como este o como los viveros de Ulía en Donostia están amenazados por la construcción, pero más por el modelo alternativo que suponen que por fines meramente comerciales, como demuestra el hecho de que cada vez que se desaloja un espacio de éste tipo queda vacío o siendo un vertedero, como lo eran los terrenos de Serralta antes de su ocupación.

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