La subestación de Dicastillo
Carta pública desde el Ayuntamiento de Dicastillo al alcalde de Los Arcos y parlamentario de UPN, Jerónimo Gómez. El pasado 24 de febrero representantes de la Plataforma No a la Línea de Alta Tensión 400 KV Dicastillo - Itsaso, formada por 220 ayuntamientos y concejos –161 navarros– y por cientos de asociaciones culturales, deportivas, medioambientales, educativas, lúdicas y religiosas, de todo tipo, comparecieron ante la Comisión de Fomento del Parlamento de Navarra para explicar las razones de la oposición al proyecto de autopista eléctrica proyectada por la multinacional Red Eléctrica Española, infraestructura que atravesará los términos municipales de nuestros pueblos, provocando un fuerte impacto medioambiental, a la salud, social y económico (vídeo de la comparecencia en el enlace www.nolineadealtatension)
Es la primera vez que representantes políticos de todos los partidos nos han escuchado, ya que desde el 2011 el Gobierno de Navarra ha sido sordo, mudo y autista a nuestras demandas de reunión, evidenciando un enorme déficit democrático, más si quienes dicen llamarse Unión del Pueblo Navarro, siembran desunión, desprecian a los representantes de los pueblos navarros y crean fractura política y social constantemente, incluso en municipios donde gobiernan, también afectados por este megaproyecto que rechazan los pueblos de la «Línea», todos excepto uno.
Sabiendo que no somos los únicos que en Tierra Estella sufren la sordera del gobierno foral (regadío, hospital, Ega, incineradora, educación…), queremos responder a Jerónimo Gómez, parlamentario de UPN y alcalde de Los Arcos, que en la comisión parlamentaria defendió la línea de 400000 voltios y la subestación de Dicastillo, argumentando las necesidades de suministro de Tierra Estella para su desarrollo económico presente y futuro.
El alcalde de Los Arcos aseguró que el Gobierno de Navarra pedirá a Madrid en el mes de marzo la inclusión en la Planificación energética 2015-2020 de la subestación de Dicastillo que el Ministerio ha eliminado, puesto que su interés se centra en la evacuación de energía eléctrica a Francia, objetivo único de esta autopista de 400 KV, y que por lo tanto nada tiene que ver con el suministro de Tierra Estella.
Jerónimo sabe tan bien como nosotros, o incluso mejor, que los problemas de suministro comarcal se hubieran solucionado hace muchos años construyendo los tendidos de 66 KV proyectados por Iberdrola, planeamiento que duerme el sueño de los justos incómodos. Alguien pensó que en Tierra Estella «cuanto peor mejor», es decir, que mientras no se solucionen los problemas de suministro, siempre se puede imponer una línea de 400000 voltios como la única solución posible, y para eso hace falta sacarse de la manga una subestación en Dicastillo que ni aparecía en la planificación inicial ni ahora en la final.
Tal estafa y atentado al sentido común –intentar matar moscas a cañonazos, o lo que es lo mismo, electrocutar el futuro desarrollo de nuestro pueblo con 400000 y 220000 voltios de telaraña eléctrica en todas direcciones– es una imposición intolerable, fuera ya de toda lógica y realmente humillante para los dicastillenses que llevamos años con semejante espada sobre nuestras cabezas, oponiéndonos con firmeza.
Sin ni siquiera escucharnos, se nos niega por parte de UPN el pan y la sal, que para un Ayuntamiento es la defensa de nuestro territorio y de nuestros vecinos, de mejorar sus condiciones de vida, y de conseguir un desarrollo económico autóctono, rechazando megaproyectos peligrosos para la salud y el medioambiente.
Conocemos tan bien como el alcalde de Los Arcos nuestra tierra, y creemos que se ha derrochado mucho dinero público en proyectos que no iban a tener implantación en el territorio ni en la sociedad y que no hace falta ni mentarle a Jerónimo, porque él ha sido en gran parte responsable de este tipo de gestión comarcal generadora de deuda y más deuda. Por tanto, ya no comulgamos con ruedas de molino: ni va a haber grandes polígonos industriales, ni urbanizaciones de miles de viviendas, ni ecociudad de Monjardín, ni campo de golf a cuenta del circuito; ni parques eólicos, ni parque tecnológico, ni una larga lista más parecida al cuento de la lechera que a la terca realidad, una realidad que sin embargo, tiene una enorme potencialidad de desarrollo y crecimiento si se acierta a dónde mirar.
Por eso más valdría que atendierais a problemas graves por los que pasan nuestros agricultores y ganaderos: dedicar recursos para apoyar a los productores de vino, espárragos y otros productos D.O. Navarra, a los jóvenes ganaderos, al pequeño comercio y la industria que ya existe, al sector forestal, y al turismo, que a pesar de la crisis sigue creciendo en Tierra Estella. Y a la sanidad y educación públicas, a nuestras escuelas rurales, a los jóvenes, que son el futuro de esta tierra. A fin de cuentas, a quienes vivimos aquí de generación en generación.
Dicastillo es como cualquier otro pueblo de la merindad, y no se nos puede abandonar ni dejar al antojo de multinacionales energéticas, cuyos intereses privados gestionan políticos que luego van a formar parte de la plantilla de esas empresas.
Así que emplazamos al Gobierno de UPN a que desista de su intención de pedir al Ministerio la inclusión de la subestación de Dicastillo en la nueva planificación energética 2015-2020, y que retire su apoyo a la autopista eléctrica, porque si persiste en tal imposición, no estará representando los intereses de 161 pueblos navarros que fueron capaces de presentar 14000 alegaciones en contra de un proyecto al que nos seguiremos oponiendo siempre, porque queremos pueblos vivos. Y ya que nosotros fuimos al parlamento, te esperamos en Dicastillo, Jerónimo, porque lo que vais a solicitar en Madrid tendrás que explicárnoslo primero aquí, en el pueblo, a ver «si nos convences».