Enkarna Cordón I Santurtzi

Al futuro de La Baluga

Hay quien dice que la Margen Izquierda también es zona encartada. Habrá quien esté de acuerdo y quien no lo esté, pero no voy a entrar en disquisiciones. Lo que sí os puedo decir es que, durante estas últimas semanas en la Margen Izquierda y más allá de ella, muchas y muchos nos hemos sentido un poco de Sopuerta, de la escuela La Baluga.

Nos hemos sentido de ese pequeño pueblo de la tan desconocida y preciosa comarca de las Encartaciones de Bizkaia. De ese pueblo en el que padres y madres de siete niños y niñas emprenden un camino en la escuela pública, para que les sea reconocido el derecho a estudiar en su pueblo, en su entorno natural.

Quienes hemos militado en la escuela pública éramos muy conscientes de que no iba a ser fácil.
Hacer camino en la escuela pública es hacer frente, en muchos momentos, a muchas injusticias.
Hacer camino en la escuela pública es reivindicar, un día sí y otro también, los derechos de nuestros hijos e hijas.Pero hacer camino en la escuela pública también es ir construyendo futuro. Futuro para las y los nuestros, pero también para los siguientes.

En un sistema donde la educación no es considerada un bien general, pilar básico de una sociedad, no es nada anormal que la escuela pública no sea prioridad y se anteponga otro tipo de intereses.

Habrá quien no haya entendido vuestra reivindicación. Habra quien, interesadamente, no la quiera entender, pero tened muy claro que a otros muchos y muchas nos habéis robado un cachito de corazón durante estos largos días.

Porque no es fácil abrir camino con lo que los más queremos en esta vida, nuestros hijos e hijas. Al respecto , nuestra sensibilidad puede alcanzar exponenciales desconocidos y es ahí donde sitúo la huelga de hambre que iniciásteis y las lágrimas que asomaban en vuestros ojos al poneros en la puerta del Ayuntamiento el día de la concentración que dio inicio a esta.

Ha pasado poco tiempo, seguramente, para que podáis ser conscientes de la solidaridad que habéís levantado a vuestro alrededor. Veinte maisus y andereños, voluntariamente dispuestos a hacerse cargo de vuestros hijos e hijas, sin mirar las consecuencías que pudiera acarrear su actitud. Monitoras voluntarias dispuestas a hacerles la comida y darles de comer. Muchos aitas y amas hablando de Sopuerta a la hora de salida de las escuelas. Adhesiones del mundo de la cultura, cargos públicos, sindicatos, amypas... los aplausos del sábado 11 en la kalejira de Bilbo contra la Lomce.

También han estado ahí los medios de comunicación, sí. Seguramente compartiréis la opinión de que algunos no os han tratado muy bien, no han sido objetivos. La relidad nos dice que la mayoría de ellos no son precisamente altavoces de las injusticias.

Pero también ha estado ahí una figura muy importante, vuestro alcalde. Un alcalde comprometido con vuestros derechos y los de vuestras hijas e hijos. Comprometido hasta el punto de iniciar tambien la huelga de hambre. Todo un ejemplo.

A todos y a todas, eskerrik asko!

Eskerrik asko, por lo que nos habéis enseñado estos días. Eskerrik asko por haber demostrado que merece la pena seguir luchando.

Parafraseando al paciente y sabio Nelson Mandela: “Todo parece imposible hasta que se hace”.

Animo eta aurrera!

Bilatu