Detrás de las cuatro letras que encabezan este proyecto se encuentra el dúo francés, afincado en Manchester (Inglaterra), formado por David Shaw y el parisino Dombrance. Si rebobinamos unos años atrás nos situamos en el París de 2012. Allí, atraídos por el submundo de la ciudad de la luz se toparon en el lugar y el momento adecuados para la música techno, la psicodelia, la cultura de club y el rock. Sin límite alguno y tras la publicación de varios singles, entraron en un estudio de grabación, encendieron el equipo y se pusieron a trabajar en su álbum de debut, “Jerks”.

En sus canciones hay reminiscencias de Primal Scream o los New Order más innovadores. DBFC conducen su música hacia intersecciones que unen la electrónica con lo orgánico, entrelazando la tecnología con el aspecto más terrenal de los instrumentos acústicos. Para la pareja, la música de club es un estilo de vida que reivindican en sus hedonistas composiciones. Toda una manera de encontrar un vínculo entre las personas, donde la cultura de club y sus flujos a menudo son capaces de cambiar la vida de la gente mediante el baile.

Y es aquí cuando, analizando su álbum, vemos que los elementos celestiales de la música psicodélica que recorre “Jenks” te pueden transportar hacia la felicidad absoluta. Eso sí, hay otros momentos en los que la paranoia vestida de aire de krautrock nos sumerge en las profundidades. Sin caer en la nostalgia, DBFC intentan transmitir fugaces momentos de belleza y transformar a través de sus canciones lo atemporal en algo permanente.

Por sus manos pasa una producción lisa y respetuosa con la instrumentación orgánica. “Sinner” es el primer sencillo del disco que recuerda a la época de “Come With Us” de Chemical Brothers; le sigue “Automatic” de tintes cercanos a Kraftwerk. Buscan el gancho para el baile en “Jenks”, donde suenan ecos a los Primal Scream de la época de “Evil Heat” mezclados con el Sonido Manchester donde las voces de ensueño se emparentan con potentes grooves, sinuosas líneas de bajo y sintetizadores.

El tema que da título al disco es una oda a la historia de una persona a la que cambió la vida una noche en un club de Blackpool, mientras que “In The Car” narra un viaje místico por carretera a través de un desierto solitario. “Autonomic” es el single perfecto, una fusión infecciosa, mientras que “New Life” es una petición sencilla y conmovedora de paz en un mundo cada vez más acosado por la división, el odio y el conflicto donde a menudo somos víctimas y actores. DBFC hacen un esfuerzo para buscar la luz a través de sus composiciones y encontrar la belleza en medio de la oscuridad.

CD AIPAGARRIA

Coca Leaf

“Deep Marble Sunrise” •&flexSpace;

Wharf Cat Records, 2017 •&flexSpace;Rock

Coca Leaf es un grupo formado por varios miembros de diferentes grupos underground. Así ZZ Ramirez proviene de bandas como Ukiah Drag y Destruction Unit, David Vassalotti y Carson Cox forman parte de Merchandise y Ben Greenberg de Uniform y Missionhubble. Entre todos han esculpido este sugerente disco a partir de una serie de sesiones de estudio llevadas a cabo en New York en el verano de 2015. Los cortes que conforman el álbum siguen sus impulsos libremente facturando una extraña combinación de funk duro, jazz, noise, no wave, improvisación libre y dub. Una propuesta llena de psicodelia donde no tienen miedo a indagar en sonidos tan dispares para mezclarlos y esperar su hipnótico resultado.