El Pleno de Bilbo aprobó ayer que sea el Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia quien gestione durante 20 años la red primaria de abastecimiento municipal, lo que supondrá que el pantano burgalés de Ordunte y la planta de Sollano, en Zalla, junto al embalse de Zollo, se integrarán en el sistema Zadorra-Beteluri. La propuesta fue apoyada por PNV, PSE y PP mientras EH Bildu y Udalberri se abstuvieron, votando en contra Goazen Bilbao.

El edil de Obras y Servicios, Ricardo Barkala, que es a su vez presidente del Consorcio, aseguró que los bilbainos «van a pagar lo mismo y van a tener el agua que han tenido siempre, pero con la garantía de que no falle». Antes de votar, el alcalde añadió que se busca «una gestión eficaz de los recursos».

Desde EH Bildu, Izaskun Guarrotxena dijo estar de acuerdo con una gestión «unificada e integrada», aunque reclamó que se habiliten mecanismos para que la oposición pueda disponer de información de cómo se desarrolla este convenio y controlar que se cumple. También Carmen Muñoz (Udalberri) comentó que tienen dudas al respecto mientras Goazen Bilbao ve el peligro de la privatización.