Joseba VIVANCO
Athletic

Como el primer día

Ziganda espera un partido cerrado y paciente que le gustaría tuviera el ambiente y propuesta de juego como ante el Dinamo Bucarest.

Óscar de Marcos sostenía tras el encuentro en Atenas que con la victoria siempre se encaran mejor los déficits de juego a tratar de mejorar. Quizá el toque de atención recibido entre semana sirva a los leones para enfrentar ojo avizor el estreno liguero ante un Getafe que de inicio podemos esperar saldrá a la defensiva, algo que desde la temporada pasada se le venía atragantando al Athletic en casa. La mala imagen, más allá del generoso resultado ante el Panathinaikos, ha sembrado lógicas dudas en el entorno bilbaino, tras una pretemporada aceptable. Incertidumbre que invitará a la lógica precaución cuando de un debut se trata y más si es ante un recién ascendido y rival al que es fácil dar por superable. Por eso quizá hizo bien ayer Kuko Ziganda al visualizar el partido que les espera a los suyos y del que también la grada deberá ser consciente. «Ellos juegan muy juntos, son muy sólidos, dejando pocos espacios entre líneas... va a ser un partido de paciencia, de no desarmarse. A ver si somos capaces de mantener un ritmo alto de juego pero sin ser precipitados. No creo que vaya a ser un partido abierto», advirtió el técnico navarro.

Un Getafe estilo José Bordalás que viene, como reconoce su entrenador, todavía falto de compenetración ante la llegada de nuevos jugadores, entre los que destaca el hábil y fantasioso japonés Gaku Shibasaki, procedente del Tenerife. Será el encargado de filtrar balones a los veteranos José Molina y Portilla, en tanto en la medular estará el exrealista Markel Bergara. Frente a ellos, Ziganda avanzó la titularidad de Williams, al margen de la ya sabida de Kepa en portería. Habrá que ver cómo evoluciona sobre todo Muniain, con un fuerte golpe tras Atenas.

El de Larraintzar quiere que el duelo de hoy sea lo más parecido posible al que le enfrentó al Dinamo Bucarest en casa. «Me conformo con el ambiente que hubo y el juego que hicimos, llevando el protagonismo y dando la sensación de que en cualquier momento podemos hacer gol», se marcó como meta. Es lo que quiere para su equipo a medida que avance la temporada y hacerlo «con regularidad». Ziganda cree que en esa línea, los suyos tienen margen de mejora en una Liga en la que entiende «la igualdad es máxima» y prueba de ello «los resultados justitos» del primer día, donde Leganés y Valencia se impusieron por un solitario gol.

Estreno liguero, el técnico navarro quiere que la afición acuda a San Mamés como si fuera el debut oficial de la temporada, y a partir de ahí, lo que pide a su equipo no es solo que gane, sino que «lo merezca, que divierta, que haga cosas, que la gente esté ilusionada, que sienta un cosquilleo. No solo se trata de correr, sino de hacer también las cosas bien». Palabra de Kuko. A partir de hoy, en Liga, veremos si sus deseos se hacen realidad y de paso el Athletic pone su nota festiva a Aste Nagusia.

Peñas hoy sin pancartas, ni banderas, ni bufandas

«3.500 kilómetros a Atenas para que dos ertzainas desplazados, con vista gorda de la directiva, no nos dejen pasar pancarta que pone Bilbo. ¿Delito? Gure estiloa?». Era la denuncia que vía Twitter hacía la Iñigo Cabacas Herri Harmaila el mismo día del partido europeo de los leones ante el Panathinaikos. Una pancarta sobre fondo rojo y blanco y donde de leía precisamente en gruesas letras «Bilbo» junto al anagrama de la ICHH se quedaba fuera de las gradas del Apostolos Nikolaidis. Ayer, varias peñas profundizaban en su denuncia y anunciaban en qué se traducirá su queja: ante el Getafe, esta tarde, no se exhibirán materiales de animación, tales como banderas, bufandas, pancartas de las peñas que se concentran en esa zona del estadio. Una denuncia que tiene el respaldo de diferentes peñas rojiblancas, además de las que conforman la ICHH, como la Euskal Lions, Gainza de Minglanilla, Koslada...

Los grupos firmantes advierten de que «no vamos a tolerar que se criminalice la figura de Iñigo Cabacas», del mismo modo que aseguran «no vamos a admitir amenazas de funcionarios vascos (como ocurrió en Grecia) por el hecho de llevar una imagen de Iñigo y ser el foco de animación en San Mamés». En ese sentido insisten en que en su ánimo solo está «recordar la figura» del joven asesinado por la Ertzaintza. Primer partido de Liga en San Mamés y las tensiones entre ICHH y club empiezan a tensarse desde ya.J.V.